El Ayuntamiento de Sant Antoni aprobó ayer en el pleno, con la abstención del Pacte, una subida de las tarifas del taxi de un cuatro por ciento, por encima del incremento del IPC. El Pacte rechaza esta subida ya que, según su portavoz, Joan Marí Serra, «no es justo que el sueldo de cualquier funcionario haya aumentado un dos por ciento y las tarifas del taxi, que no se tiene que olvidar que es un servicio público, el doble».
Los progresistas, sin embargo, se abstuvieron en la votación ya que el equipo de gobierno rectificó y ajustó los precios a la baja de la propuesta inicial presentada por los empresarios. «Había algún trayecto que subía un 11 por ciento con respecto al año pasado», explicó. Marí Serra también reclamó que se regule en la normativa que regula el servicio del taxi el transporte de un animal de compañía y la implantación del taxímetro.
El Ayuntamiento también aprobó ayer en el pleno el proyecto de ensanchamiento del Camí General, a la altura de Can Rich. El equipo de gobierno, que no ha podido cerrar un acuerdo con los dos propietarios de la zona afectada por la obra, iniciará un proceso de expropiación. Además, el alcalde se comprometió a que el proyecto de urbanización de Roca Baixa no invada la zona de protección de 20 metros.