La Demarcación de Costas ya ha ordenado la demolición de las obras ilegales que se estaban realizando en la zona de Salt d'en Portes, también conocida como Roca Baixa, en Sant Antoni. Los esqueletos de casetas, que fueron precintados por la Guardia Civil, invaden el terreno donde antes había una pequeña playa que ya ha desaparecido. Costas confirmó a este periódico que el promotor deberá pagar una sanción económica de 9.000 euros (1'5 millones de pesetas) y echar abajo las construcciones para dejar la zona tal y como estaba antes. «Disponemos de tres ofertas de contratistas para demoler las construcciones. En el caso de que el promotor no lo haga por su propia cuenta, procederemos a ejecutar la demolición a su cargo», explicó el jefe de servicio de Obras y Proyectos de la Demarcación de Costas, Carlos Jover.
Estas obras fueron denunciadas por el Ayuntamiento, al constatar que nadie había pedido permiso para ello. En esta misma zona hay otras cuatro casetas varadero antiguas, que cuentan con los preceptivos permisos, según indica el edil de Medio Ambiente, José Ramón Serra. Por otro lado, el Ayuntamiento está pendiente de que Costas dé luz verde a la reforma de la barandilla de madera que hay en la misma zona, concretamente en el sendero por el que se llega a la Cova de ses Llangostes. La barandilla está en muy mal estado y puede ser peligroso, incluso, tal y como apunta José Ramón Serra, para las muchas personas que utilizan este camino. «Cuando Costas nos dé el permiso correspondiente, el Ayuntamiento se hará cargo de la reforma», informó el concejal de Medio Ambiente.