Los secretarios generales de los sindicatos UGT y CC OO de Balears, Lorenzo Bravo y José Benedicto, y las Pitiüses, José Antonio Carmona y Diego Ruiz, señalaron en Eivissa que están convencidos de que «no hay crisis en el sector turístico» aunque reconocen que «no ha habido una contratación a los niveles del último año y del anterior». José Benedicto apuntó que el archipiélago «está a los niveles de contratación del año 1995», lo que «no quiere decir que exista crisis».
La desaceleración tiene una explicación mucho menos alarmista, a juicio de los sindicatos, que creen que «había que ponerle un límite a esto del crecimiento que no es infinito», apuntó Lorenzo Bravo que matizó «no se puede permitir que porque haya un pequeño resfriado en Alemania que repercuta en las reservas haya aquí una epidemia o una situación de alarma general». Respecto a los hoteleros, los sindicatos están convencidos de que los empresarios no van a perder dinero. «Los hoteles no están al 50 por ciento sino por encima del 70 por ciento y en algunos lugares por encima del 100», apuntaron. «Es verdad "matizaron" que no hay el overbooking que ellos quisieran, porque les gustaría meter tres camas donde hay dos».
José Benedicto remarcó que es lógico que se hagan menos contrataciones si vienen menos turistas «y basta, porque no hay crisis ya que los niveles de 1995 no son malos. Lo insostenible son los niveles que se alcanzaron en 2000 y 2001». Lorenzo Bravo remarcó, por otra parte, que en sectores como la construcción se habían generado «unas perspectivas demasiado altas y un número espectacular de trabajadores». Afirmando que este año 2000 trabajadores más que el año pasado en el sector de la construcción, Bravo remarcó que «se ha construido en cinco años lo que debería haberse construído casi en veinte».
Los sindicatos aseguran que las quejas que verdaderamente deberían preocupar ahora «son las de los visitantes que se quejan de la merma de la calidad de los servicios turísticos». «La situación "opinan" puede irse de las manos» por lo que han lanzado propuestas como la de realizar un pacto de desarrollo económico antes que un pacto por la ocupación. «No se pueden sostener 43.000 trabajadores en Balears empleados en construcción eternamente», advirtieron.