Tras la llegada de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarín al Club Náutico el pasado viernes, la ciudad de Palma dio ayer la bienvenida a un nuevo miembro de la Familia Real española. El príncipe Felipe fue el centro de las miradas durante la jornada del domingo. Vestido de sport con una camiseta blanca y un pantalón corto de color claro, el Príncipe mostró su simpatía en cada una de las sonrisas que arrojó a los medios de comunicación que se encontraban presentes.
Tras llegar a las instalaciones del Club Náutico, el príncipe Felipe fue saludado por una de las caras populares del evento, Enric Puig. El dueño de Aguabrava, uno de los principales patrocinadores de la Copa del Rey de vela, departió con el heredero de la Casa Real española durante unos instantes y le deseó mucha suerte en la competición.
Enric Puig también tuvo tiempo para bromear con el Príncipe. El empresario no dudó en mostrar a don Felipe su cámara de fotos Canon, la misma que posee el Rey don Juan Carlos, al mismo tiempo que repetía la frase de su majestad al ver la cámara. «Yo tengo una igual», señaló el Rey.