El proceso de regularización de inmigrantes se está produciendo a cuentagotas, según la opinión del sindicato Comisiones Obreras. Un total de 350 inmigrantes esperan en Eivissa saber si la Delegación del Gobierno ha resuelto su expediente de regularización, según los datos facilitados por CITE Algunos deciden trasladarse por su cuenta hasta la Oficina de Extranjería que está en Palma para saber el estado en el que están sus trámites.
El número de expedientes de regularización de permisos de residencia y solicitud de trabajo presentados en Eivissa en 2001 es de 350, donde se incluyen tanto las nuevas ofertas como aquellos presentados con anterioridad a la fecha en la que se inició el proceso de regularización. Extranjería decidió resolver primero los expedientes que estrictamente consideraban de regularización y una vez acabado con ese periodo comenzar con los previos. Este proceso está considerado como «un caos» por CITE, ya que en principio todos son de regularización, «pero la administración considera que un porcentaje muy alto de regularización ya están finalizados», apuntó Eva Cerdeiña, del CITE.
Sostiene que el proceso se hace a cuentagotas. «Las listas que nos facilita la Delegación del Gobierno aparecen tanto expedientes de enero, febrero y marzo de 2001 e incluso anteriores a esa fecha. Tal y como se está desarrollando el proceso es muy complicado», apuntó Eva Cerdeiña, del Centro de Información al Trabajador Extranjero (CITE).
En el último mes se han intensificado las reuniones con la Delegación del Gobierno para agilizar las tramitaciones y subsanar estos problemas después del parón del verano. Carmen Duarte, del CITE de Eivissa, insiste en la necesidad que agilizar el proceso por los problemas que se encuentran hoy los inmigrantes. «No pueden trabajar porque no tienen el permiso y algunos están sólo pendientes de los trámites».
Duarte advierte de que, además, la situación se agrava en el caso de inmigrantes de que han trabajado en otras comunidades y se desplazan a otros donde «se encuentran con el problema de que no reconocen su permiso. El tema de la inmigración es un problema muy gordo que hay que afrontar».