El Ayuntamiento de Santa Eulària ha remitido una carta de denuncia al Instituto Balear del Agua y la Energía (Ibaen), dependiente del Govern balear, por los daños ocasionados en el barrio de Can Guasch por las obras de instalación de la canalización que debe conectar las desaladoras de Eivissa y Sant Antoni, con una ramificación que llegue hasta Santa Eulària.
El proyecto, promovido por el Ibaen, corre a cargo de la constructora ACS. Los servicios técnicos del Ayuntamiento, a raíz de las denuncias de los vecinos del barrio, han comprobado que la empresa no ha respetado las instalaciones existentes: servicios de abastecimiento de agua, saneamiento y alumbrado público. El Consistorio asegura en su misiva que la constructora ha producido «daños importantes, haciendo caso omiso a las indicaciones dadas».
El concejal de Urbanismo, Vicent Riera, apunta, por su parte, que la empresa constructora está dejando el pavimento del camino general, que pasa por el barrio de Can Guasch, hecho un desastre. «Es una chapuza», subraya. ACS cubre con hormigón las zanjas abiertas sobre la carretera, sin fresar antes el pavimento, según explica Vicent Riera.
El Ayuntamiento entiende que el Ibaen debe dar instrucciones a la empresa contratada para que arregle los desperfectos ocasionados y acometa el resto de la obra con más cuidado. El Consistorio pone en aviso al Ibaen, además, porque la instalación de las canalizaciones se aproxima a una zona crítica, donde se concentran depósitos municipales y redes generales del municipio.
Santa Eulària advierte, además, que en el caso de que el Govern o la constructora ACS haga caso omiso a las observaciones realizadas por los técnicos municipales, el Consistorio «tomará las medidas que estime oportunas».