Los operarios de Mediterránea de Servicios comenzaron ayer a instalar la tubería del puerto que sustituirá a la que reventó hace casi un mes. La canalización, de 4'5 metros y que conecta la red de alcantarillado con la estación de bombeo del puerto, quedará fijada entre hoy y mañana, lo que pondrá fin al vertido ininterrumpido de aguas residuales al mar.
Esta tubería se repondrá más adelante por otra de acero 316, un material mucho más resistente que en este momento se está fabricando en Alicante. Para atajar el derrame de detritus en las aguas del puerto, el Ibasan optó por colocar una canalización provisional hasta que no esté lista la definitiva.
El vertido de aguas fecales se inició la tarde del viernes 24 de enero (hace ya 27 días). La deteriorada tubería que conecta la red de alcantarillado con la estación que impulsa el agua hacia la depuradora no aguantó más y reventó. Desde entonces, las aguas fecales procedentes del casco antiguo de la ciudad, incluida la zona de la avenida España, van a parar al mar por distintos colectores.
En el peor de los casos, cada día puede derramarse en el mar un caudal máximo de 1.500 metros cúbicos de aguas residuales, según calcula el delegado del Instituto Balear de Saneamiento (Ibasan) en Eivissa, Ramón Mayol, por lo que a día de hoy podría haberse precipitado en el puerto 40.500 metros cúbicos de detritus.
El Ibasan trató de reparar la avería al instante colocando una brida, que es la pieza que se utiliza para conectar dos tuberías. Este remiendo no fue suficiente para evitar la fuga y, por ello, se vieron obligados a acometer la costosa operación que supone cambiar la cañería. Curiosamente, el Ibasan tenía pendiente la sustitución de esta tubería por otra desde hace por lo menos dos años.
Mediterránea de Servicios puso en marcha un equipo de tres buceadores, con equipos de respiración asistida y trajes especiales para trabajar en aguas residuales, para hallar la avería y guiar desde abajo toda la operación. La empresa que se encarga del mantenimiento de la depuradora de Eivissa, Infilco, también colabora en la instalación de la nueva canalización.