Síguenos F Y T I T R

Semillas para educar

Los alumnos del colegio Cervantes estrenan este año su segundo huerto ecológico, una iniciativa cada vez más común entre los escolares

Niños de entre tres y doce años trabajan en los dos huertos ecológicos con los que cuenta el colegio. Fotos: V. FENOLLOSA

El Colegio Público Cervantes, en Sant Antoni, cuenta este año con dos huertos ecológicos en sus instalaciones que permiten a los alumnos del centro acercarse a una cuestión tan importante y a menudo tan olvidada como es el medio ambiente. Gracias a una colaboración de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) de 7.500 euros anuales, y al apoyo de la Cooperativa Agrícola de Sant Antoni o de Can Guillamó, que ofrecen abonos y conocimientos profesionales al colegio, los alumnos de entre tres y 12 años de Sant Antoni trabajarán hasta final de curso en el mantenimiento de huertos ecológicos. «El que ya teníamos será para los alumnos de primaria y el nuevo para infantil, porque sólo con uno se nos quedaba pequeño», explicó la directora del centro, Ana María Andrés. Un total de 1.000 alumnos han participado en esta actividad que, desde hace tres años, intenta que los chavales se integren con la naturaleza a través del trabajo diario sobre el terreno. «Ya es hora de que vean que los tomates no vienen en cajas», bromeaba el concejal de Medi Ambient, José Ramón Serra, Pilot, quien junto al alcalde de Sant Antoni, Antoni Marí Tur, acudió a la presentación de la iniciativa, promovida por el Ayuntamiento. «Además de contar con un jardinero, una ingeniera de la Cooperativa Agrícola, Alicia Morales, dará charlas a los alumnos», comentó Serra.

De un tiempo a esta parte son muchos los colegios que se han sumado a la iniciativa de los huertos ecológicos. Tan solo en Sant Antoni, además del Colegio Público Cervantes, los centros de Guillem de Montgrí, Can Coix y Sant Rafel también han incorporado esta nueva 'asignatura' a su temario y otros, como el de Buscastell y Corona, ya lo han solicitado. Cada día un grupo de alumnos se acerca hasta el huerto y, siguiendo las indicaciones del jardinero, contratado para una hora a la semana, riegan o abonan las patatas, tomates o guisantes. Dentro de unos meses llegará el momento de la recolecta, tal vez el que con mayor ilusión se espera.
S.Yturriaga

Lo más visto