La desaladora que el Ministerio de Medio Ambiente proyecta construir en Santa Eulària disparará al alza el precio del agua no sólo en Santa Eulària, sino también en el resto de la isla. «Si Santa Eulària sólo consume agua de su desaladora el precio del agua desalada aumentará en toda la isla», dice el director general de Recursos Hídricos del Govern, Antonio Rodríguez, «ya que de nuevo durante buena parte del invierno las plantas de Eivissa y Sant Antoni volverán a estar desocupadas».
Por descontado, con la nueva planta, el precio del agua en Santa Eulària subirá. «Si tenemos en cuenta el tiempo que la desaladora estaría parada, dada la demanda que hay en Santa Eulària, el precio del agua que saldría de la desaladora se pondría en torno a 150-200 pesetas»,indicó. Rodríguez Perea señaló que al precio actual del agua en Santa Eulària, distinto en cada concesionaria, «habría que añadir esta cantidad». En contra, según dijo el director general de Recursos Hídricos, la interconexión de las desaladoras de Eivissa y Sant Antoni disminuirá el coste del agua, que se situará, a la salida de la desaladora (el Consistorio después fija la tarifa final), en 105 pesetas.
El director general de Recursos Hídricos del Govern, Antonio Rodríguez Perea, aseguró,además, que el municipio de Santa Eulària no puede mantener una desaladora de 10.000 metros cúbicos y, por ello, ahora plantea la posibilidad de instalar placas fotovoltaicas. «Alguien del Ayuntamiento ha hecho cálculos y se ha dado cuenta que los números no salen». Rodríguez Perea apuntó que el Ministerio de Medio Ambiente no ha pedido ayuda económica a la Unión Europea para construir la planta y que, asimismo, la empresa que la gestione tiene derecho a cargar en la tarifa el 15 por ciento de la inversión durante los 15 años de vigencia de la concesión. La consellera de Medi Ambient, Margalida Rosselló, subrayó ayer en Eivissa que el ex ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, tiene «una obsesión» por construir desaladoras como si fuera la única vía válida para solucionar el problema del agua. «Es innecesaria y provocará más problemas que beneficios», aseguró la titular de la Conselleria de Medi Ambient.