Carabias no había dicho nada hasta ahora porque sólo utiliza el agua para el riego de las plantas del jardín. «Tendría que haberlo denunciado, pero cómo este año ha llovido bastante, tampoco he tenido que regar mucho y al ser por aspersión el gasóleo se evapora y no llega a la tierra», justifica. Este vecino de Santa Gertrudis conoció a través de la prensa que otros dos pozos cercanos al suyo también estaban contaminados por gasóleo.
Técnicos de la dirección general de Recursos Hídricos, dependiente del Govern balear, recogieron el jueves muestras de agua de los tres pozos afectados para analizarlos y así aclarar cuál es el foco de contaminación. Sogesur, la empresa que gestiona el agua en Santa Eulària, también ha enviado a un laboratorio especializado en este tipo de casos para que averigüen el origen de la fuga.
Los otros dos pozos contaminados se encuentran a 400 y 550 metros de distancia de la estación de servicio, de donde se sospecha que procede la fuga de carburante. Sanitat informó a los técnicos del Consell, después de hacer los primeros análisis del agua, que los pozos estaban contaminados por un escape de un tanque de gasóleo, según explicó a este periódico la consellera insular de Medio Ambiente, Fanny Tur.
Uno de los vecinos, Josep Sunyer, detectó que su pozo estaba contaminado en septiembre. Desde entonces ha presentado distintas denuncias ante Sanitat, la Conselleria de Medi Ambient y la dirección general de Industria sin que haya servido para solventar el problema. La pasada semana presentó la primera denuncia ante la Fiscalía por un presunto delito ecológico. Días después declaró ante el Fiscal para ratificar todo lo expuesto.