El presidente electo del Consell Insular, Pere Palau, destacó ayer por encima de todo «la vocación insularista» demostrada por el nuevo máximo responsable del Govern balear, Jaume Matas, en el debate de su investidura en el Parlament. «Ha quedado muy clara la vocación insularista de este presidente. Ayer [por el jueves] reiteró por segunda vez, porque parecía que había algún portavoz de un grupo parlamentario que quería sembrar dudas, que el Govern pondrá todo lo que sea necesario a disposición del presidente del Consell Insular de Eivissa y Formentera para que el programa del PP se cumpla íntegramente», aseguró Palau después del último pleno celebrado ayer para aprobar las actas de las anteriores sesiones.
El portavoz del PSIB-PSOE, Francesc Antich, y del PSM-ENE, Pere Sampol, fueron quienes, según dice Palau, «sembraron dudas» sobre la política de Matas en las Pitiüses. Sampol preguntó directamente a Matas si durante los próximos cuatro años iba a congelar el traspaso de competencias al Consell de Eivissa y Formentera como parece que sí va a suceder en Mallorca. En su turno de respuesta, Matas dijo: «El programa electoral del PP de las Pitiüses [figura el traspaso de competencias en promoción turística, juventud, y medio ambiente] se va a cumplir estrictamente». Para Palau es «una satisfacción» oír de boca de Matas ante el Parlament este compromiso.
Para Palau, el debate de investidura de Matas fue especialmente «fructífero» para las Pitiüses y recalcó el hecho de que Matas tendió la mano a la oposición para consensuar los asuntos más importantes que atañen a la comunidad. «Ha quedado claro cómo va a gobernar el PP durante los próximos cuatro años, con el consenso, en la mediada de lo posible, del resto de fuerzas políticas. El pacto con UM, realizado desde una posición de mayoría absoluta, es un ejemplo de ello», indicó Palau, que ayer también viajó a Palma para asistir a la toma de posesión del Consolat de la Mar.