M. JUNCOSA/J. MESTRE
El director general de Aviación Civil, Ignacio Estaún, inició ayer
los primeros contactos con compañías aéreas nacionales e
internacionales para comunicarles la decisión del Gobierno de
declarar las rutas aéreas interinsulares de servicio, según anunció
ayer la consellera d'Obres Públiques, Habitatge i Transports, Mabel
Cabrer, quien aseguró que dicha declaración será una realidad antes
de las fiestas de Navidad.
Pese a no informar de las condiciones concretas de la declaración, todavía por cerrar, la consellera adelantó que establecerá las frecuencias y asientos mínimos, que variarán en función de las temporadas de verano y de invierno. El Govern pretende que las aerolíneas puedan combinar un mayor número de frecuencias con aviones turbohélices, de menor capacidad, y permitir la entrada de los aviones reactores.
La declaración de rutas de servicio público, que no afectará a las conexiones entre Balears y la Península, fijará un precio máximo para los vuelos entre islas que será de obligatorio cumplimiento para las compañías aéreas, aunque el Govern pretende que algunos colectivos puedan beneficiarse de descuentos especiales sobre esa tarifa. Además, se está negociando la posibilidad de que las compañías adjudicatarias puedan vender mediante promociones especiales los excedentes de plazas en cada vuelo, ya que se les exigirá que vuelen al 80 por ciento de capacidad para garantizar un servicio de calidad.
La actualización de la tarifa máxima se revisará cada año y sólo se podrá incrementar un máximo del 75 por ciento del Índice de Precios al Consumo, IPC, salvo que se produzcan situaciones especiales.
Por otro lado, la presidenta del Consell de Menorca, la socialista Joana Barceló, pidió ayer que el trayecto aéreo Maó-Eivissa compute como un solo vuelo aunque los pasajeros hagan escala en Palma.
Barceló pidió ayer a Jaume Matas que aunque la declaración de servicio público no incluya un vuelo directo entre Menorca y Eivissa sí deben contemplarse ventajas para los ciudadanos que quieran desplazarse de una isla a otra. «Soy partidaria que, como mínimo, haya mecanismos para que con el mismo dinero que nos cuesta ir de Maó a Palma podamos viajar a Eivissa; no es aceptable pagar dos billetes», planteó Barceló, quien también quiere que el Govern garantice un determinado número de vuelos que una Menorca con Madrid y Barcelona, especialmente en invierno. Además, la presidenta de Menorca espera que Matas garantice algunos de los proyectos previstos en la isla que deben financiarse con la ecotasa.