El juez todavía no ha ordenado el cierre de la gasolinera de Santa Gertrudis solicitada la pasada semana por la Conselleria balear de Comerç, Indústria i Energia al detectar defectos técnicos en la doble cámara de los tanques de combustible.
Esta estación de servicio, propiedad de Hydrotechnik España S.A., sufrió en septiembre del año pasado una fuga de gasolina 98 sin plomo que ha contaminado el acuífero y casi una veintena de pozos de la zona.
La gasolinera, según aseguró ayer a este periódico su responsable en la isla, Marinela Torres, no ha recibido notificación alguna del juez, por lo que ayer funcionaba con total normalidad. De todos modos, Torres pidió ayer mismo en el Ayuntamiento de Santa Eulària una licencia de obras para levantar la gasolinera y subsanar las deficiencias de los tanques.
Torres subrayó que la gasolinera no pierde ni una gota de carburante: «Si así fuera, la gasolinera ya estaría cerrada». La responsable de la estación de servicio hizo especial hincapié en que la normativa permite a la gasolinera funcionar con una cámara, al disponer de una sonda (sistema veeroroom) para controlar el volumen de los estanques y el escape de combustible. «No hay pérdidas, sólo deficiencias en la doble cámara de algunos estanques», explicó Torres.
El conseller balear de Comerç, Indústria i Energia, José Juan Cardona, explicó la pasada semana en Eivissa que, una vez cerradas las instalaciones, se vaciará el combustible de los tanques y se repararán las paredes de seguridad.
El anterior gobierno ya ordenó precintar el tanque subterráneo donde en septiembre se produjo la fuga. Este depósito volvió a abrirse poco después, una vez que la gasolinera, presentó un certificado de estanqueidad.