El Gen, Amics de la Terra, las cooperativas, la Pimeef, hoteleros y otras asociaciones representativas de la sociedad ibicenca se reunieron ayer en el primer forum insular de participación ciudadana de la Agenda 21, un plan que busca compatibilizar crecimiento y sostenibilidad medioambiental en las Pitiüses.
La empresa que realiza la segunda parte de la auditoría medioambiental (Innova) está convocando reuniones en cada ayuntamiento para abordar sus problemas y completándolas con encuentros insulares.
La primera parte de la auditoría ambiental era la de diagnóstico, comprobando cuáles son los problemas medioambientales para poder abordarlos. Una vez completada, la segunda parte consiste en realizar un plan de acción que debería estar completado en febrero de 2001.
El concejal insular de Medio Ambiente, Josep Mayans, reconoce que este plan supone «muchísimo trabajo» pero confía en que las asociaciones implicadas «aporten ideas y planes para solucionar temas como el colapso del tráfico en el municipio de Eivissa o los problemas de acceso a la vivienda», entre otros. Las asociaciones que participan en la Agenda 21 han dejado claro que hay que dar prioridad a temas como la conservación de la calidad de las aguas y la protección de la naturaleza y el paisaje.
El plan de acción, una vez elaborado, irá al comité insular de la Agenda Local 21 que se remitirá a la comisión balear de medio ambiente para que lo apruebe. Después hará falta un plan de seguimiento para que se lleven a cabo las acciones, que requerirán subvenciones.
El conseller insistió en que la institución está comprometida en sacar adelante el plan y que no es un problema el hecho de que lo iniciase el anterior gobierno del Pacte.