La conselleria balear de Medi Ambient tiene previsto invertir en los próximos meses en torno a 610.000 euros con la intención de que antes de la próxima temporada de verano la depuradora de Sant Antoni funcione a pleno rendimiento y se termine con los malos olores provocados por la planta.
El director general de Recursos Hídrics, Joan Crespí, explicó ayer en Sant Antoni que los proyectos previstos, que actualmente están en fase de licitación, consistirán en cambiar y colocar 18 nuevas bombas y en realizar una serie de actuaciones en la decantadora de fangos, además de llevar a cabo una pequeña obra civil en la planta.
Por otra parte, Crespí explicó que durante esta semana se finalizarán las obras de mejora que la conselleria inició el pasado marzo en la planta de Sant Antoni. Los responsables del Ibasan y representantes del Govern se desplazaron ayer hasta la depuradora para explicar estas actuaciones a los vecinos.
El responsable de Recursos Hídrics aseguró que se están estudiando diversos proyectos para mejorar depuradoras y emisarios, como el de la creación de una planta en Cala Tarida, que actualmente se está redactando.