La delegación de las Pitiüses de la Agencia Tributaria ha tramitado este año un total de 39.793 declaraciones de la renta correspondientes al ejercicio de 2002. El dato más curiosos es que el 63 por ciento de las declaraciones (29.914) fueron negativas, o sea que la administración tuvo que devolver dinero. Concretamente, algo más de 15 millones de euros (2.500 millones de pesetas).
De todos modos, del total de declaraciones con resultado a devolver percibieron su devolución 23.841 por importe de 14,5 millones. Las 1.433 restantes o no tienen derecho a devolución o permanecen aún en proceso de comprobación.
Por su parte, un total de 14.266 declaraciones fueron positivas, con un ingreso total de 19 millones de euros. El importe medio de las declaraciones a ingresar fue de 1.378 euros, mientras que las de devolución, 615 euros.
El 28 por ciento de las declaraciones presentadas fue a través de Internet o intranet, lo que supone un importante aumento con respecto a la campaña anterior (16 por ciento). Por otra parte, al igual que en el resto de Balears y de España, el 95 por ciento de los declarantes ha utilizado el programa de ayuda que cada año desarrolla la Agencia Tributaria para facilitar el cumplimiento voluntario de las obligaciones fiscales.
El programa PADRE permite que el contribuyente no tenga que realizar ningún cálculo para efectuar la declaración. El usuario sólo debe introducir sus datos y rendimientos para que el programa informático calcule la cuota a pagar o devolver.