El acto de inauguración del Belén municipal de Eivissa congregó ayer a decenas de personas y autoridades locales como Pedro Campillo y Leopold Llombart, concejales de Gobernación y Policía respectivamente que se dieron cita a las 19,00 horas para abrir al público uno de los puntos de visita obligados a lo largo de estas fiestas. Los componentes del Coro Juvenil del Patronat Municipal de Música ambientaron el acto con un breve recital de villancicos mientras los niños se arremolinaban en la entrada a la carpa.
Por cuarto año consecutivo Manuel Rodríguez Cordones ha vuelto a ser el artífice del montaje que comenzó el pasado 26 de noviembre y en el que ha contado con la colaboración de su esposa, María del Carmen Hoyos, Luis Francisco Muñoz y Cayetano Reyes.
Este belenista aficionado del Puerto de Santa María ha montado un Belén mucho más corto y concentrado que el que había preparado el año pasado en el claustro del Ayuntamiento. «Este año tiene 8 metros de largo frente a los 17 del año pasado y hemos tenido que prescindir de la matanza de Herodes y la huida a Egipto», explicó Manuel mientras mostraba la gran cantidad de detalles que incluye esta representación en la que abundan las figuras automatizadas y destaca el juego de ambientes obtenidos con ciclos de luz de tres minutos, en los que se pasa del amanecer al anochecer.
La Anunciación, la búsqueda de posada, la llegada de los Reyes a Belén, el Nacimiento y la Aparición a los pastores son algunas de las escenas que se pueden seguir en el recorrido del Belén municipal de Eivissa que se representan en una parte urbana, al inicio del recorrido con edificaciones muy trabajadas interna y externamente, al igual que las escenas en segundo y tercer plano, y una parte rural en la que destaca una cascada con un riachuelo con agua, una granjera dando de comer a sus gallinas y la representación del Nacimiento en la que todavía no está el Niño. «Lo pondremos el día 24 a las doce de la noche en un acto familiar», adelantó María del Carmen. E.E.