El matadero de Formentera fue inaugurado ayer, 17 años después del inicio de su construcción. Parece, por la demora temporal, una obra faraónica, que no lo es por su tamaño, pero sí por los múltiples problemas y cortapisas que han impedido que un edificio finalizado hace casi tres lustros no hubiera sido considerado apto para su funcionamiento hasta ayer.
El conseller de Comerç, Industria i Energia del Govern de les Illes Balears, Josep Juan Cardona; el alcalde de Formentera, Juanma Costa y el diputado por Formentera, Pep Mayans, fueron los encargados de inaugurar el recinto situado en el polígono industrial de Sant Francesc, junto a las actuales dependencias de la Guardia Civil de Formentera. Tanto Juan como Costa señalaron la importancia de la consecución de que el matadero de Formentera pueda por fin cumplir su función, y ambos resaltaron que no se trata del logro de un partido determinado, ya que en década y media los Consistorios han sido de todos los colores, sino de la voluntad y la necesidad de la isla de contar con su propio matadero. Un esfuerzo y una voluntad en la que Josep Juan Cardona quiso destacar la tarea y el esfuerzo desarrollado durante años por los ganaderos y agricultores de la isla que han sido los que han exigido la puesta en marcha de este servicio municipal.