El magistrado del Tribunal Superior de Justicia de Balears Antoni Montserrat ha dictado un auto de archivo de la querella criminal interpuesta por la promotora Blauvert S.L. en contra del alcalde de Eivissa, Xico Tarrés; el ex concejal de Urbanismo de Eivissa Joan Boned y la ex consellera insular de Medio Ambiente, Cultura y Patrimonio, Fanny Tur. El magistrado decreta el «archivo de las actuaciones, con sobreseimiento libre, por estimar que los hechos no son constitutivos de infracción penal». Contra esta resolución cabe recurso.
En la querella, Blauvert acusaba a Tarrés, Boned y Tur de «haberse concertado en la voluntad y en la ejecución de las acciones que fueran necesarias» para impedir a la promotora la edificación de un edificio de 13 niveles en Puig d'es Molins y para «privarle arbitrariamente, sin contraprestación o indemnización alguna de ese mismo derecho edificatorio». Blauvert también imputó a los acusados un delito de prevaricación y falsedad documental.
El Fiscal emitió un escrito al juez pidiendo el archivo de la causa al constatar que los hechos denunciados no eran constitutivos de delito alguno. El juez, en su auto, argumenta que de haber sido delictivas las actuaciones denunciadas en el escrito de querella, «necesariamente habrían debido basarse en la confabulación de un elevado número de personas, no solamente los inicialmente querellados, lo que hace que, de entrada, todo ello sea inverosímil en cuanto a un concierto para una operación criminal». El juez reconoce que el técnico del Consell Joan Ramon Torres, imputado por los informes redactados para la protección de Puig d'es Molins, tampoco ha cometido delito alguno.
El ex concejal de Urbanismo Joan Boned mostró su satisfacción por el auto del juez. «Tengo una alegría personal por dejar de ser un miembro del club de imputados de esta isla», subrayó, para añadir a renglón seguido: «Aunque a nosotros nos imputaron por proteger el territorio al contrario de otros que lo son por permitir construcciones ilegales». El alcalde de Eivissa, Xico Tarrés, siempre ha mantenido que él es maestro y que, por tanto, no adopta ninguna decisión si no cuenta antes con el beneplácito de los técnicos en urbanismo y se adapta a la normativa.