Durante el primer año regentando la presidencia de la Pimeef, Riera quiso animar a los empresarios a seguir avanzando «a pesar de que estamos pasando por momentos muy duros debido a la incertidumbre económica que hay actualmente en todos los países». En este sentido, Riera indicó que los empresarios de las Pitiüses han salido airosos de momentos más difíciles «por lo que confiamos en que los empresarios pongamos todos los recursos para recuperar el liderazgo turístico que las Pitiüses merecemos». El presidente de la Pimeef destacó en su discurso la necesidad de «conseguir vender una imagen real de seguridad y tranquilidad en las Pitiüses».
El presidente calificó a la patronal como «un referente social para nuestras islas y lo que pretendemos es que sigamos así durante mucho tiempo con el fin de reducir los déficits de nuestra economía insular».
Mariano Riera también hizo referencia al plan de marketing de las Pitiüses aunque indicó que aún hay que realizar «muchos esfuerzos para que se cumplan los objetivos reflejados en el documento».
El alcalde de Eivissa, Xico Tarrés, quiso destacar la importancia de la Pimeef en las Pitiüses por congregar a todos los sectores empresariales.En este sentido, Tarrés comentó que en muchas ocasiones no se escoge el camino «deseado por todos por lo que cualquier proyecto de nuestras islas siempre suscita polémicas, pero debemos tirar para adelante». Tarrés hizo un llamamiento a los asociados de la Pimeef para que muestren apoyo y participación «en todos los proyectos que se están discutiendo en la calle» y recordó el primer discurso, hace cinco años, cuando estaba vigente la polémica creada por la incorporación de las zonas azules en el municipio de Eivissa y la creación del dique de Botafoc: «No podemos hacer barbaridades porque el futuro de nuestros hijos depende de nosotros pero tenemos que dar soluciones a los problemas». En esta línea, Tarrés hizo referencia al proyecto 'Eivissa Centre' y al colegio de sa Graduada y pidió «comprensión y diálogo», dirigiéndose, específicamente, al presidente de la FAPA, Toni Pomar, que también asistió a la cena.