Un grupo de vecinos de es Pujols está preparando una recogida de firmas que ha de comenzar hoy o este fin de semana para exponer sus quejas respecto al servicio regular de autobuses y solicitar una frecuencia de horarios más acorde con la realidad y necesidades de los residentes en dicho núcleo urbano. Los vecinos prevén presentar las firmas en el Consistorio de Formentera y han desechado la posibilidad que se barajó de hacer una manifestación con pancartas delante del Ayuntamiento.
Las quejas principales se centran en cuatro puntos básicos, el primero de ellos es que para coger la barca de las nueve y media de la mañana han de desplazarse hasta el puerto de la Savina en taxi ya que el primer autobús en esa dirección sale de es Pujols alrededor de las diez menos cuarto. En segundo lugar, los vecinos de es Pujols reclaman un servicio con Sant Francesc adecuado a las actividades extraescolares de los pequeños, tanto para ir como para volver, ya que las conexiones son deficientes y el último autobús desde Sant Francesc hacia es Pujols en la actualidad es poco después de las seis de la tarde y la mayoría de las actividades deportivas no finalizan hasta las siete de la tarde.
En otro orden de cosas las peticiones se centran en el fin de semana y por dos motivos bien diferenciados. Teniendo en cuenta que sábados, domingos y festivos no hay servicio regular de autobuses, el vecindario reclama un servicio público para ir a comprar a Sant Francesc, donde está la única gran superficie de alimentación de la isla, y por lo que a los domingos se refiere reivindican la posibilidad de ir hasta Sant Ferran a escuchar misa y regresar posteriormente. En ambos casos hay que hacer precisiones. En el aspecto religioso hay que dejar claro que en es Pujols no hay iglesia y, por tanto, no se celebran en dicho núcleo servicios religiosos, y en segundo lugar y en materia de comercios, destacar que no hay librería, quioscos de prensa, panadería, ferretería o comercios de alimentación abiertos de los que abastecerse de forma habitual. Quienes, por el contrario, no tienen la intención de hacer ninguna reivindicación por lo precaria de su conexión mediante transporte de pasajeros regular son los residentes en la Mola.