El Consell pidió luego al Govern, que es a quién compete la dirección de obra del proyecto, la ampliación de la parte frontal de las vallas para evitar que un motorista pudiera pasar por debajo. El Govern accedió a ello aunque sólo modificó las barreras de las curvas de la carretera. La consellera insular de Carreteras, Stella Matutes, también informó por carta a la oposición de que «exigirá» el cumplimiento de la normativa una vez finalizada y recepcionada esta obra.
Casi todas las vallas que bordean las carreteras de la isla son de tipo guillotina con el consiguiente peligro que eso entraña para los motoristas. La Comisión de Seguridad Vial aprobó hace un mes aproximadamente un conjunto de medidas para reducir la siniestralidad en las carreteras, entre las que figura instar al Gobierno a que ordene la retirada de todas ellas antes de que acabe 2005 y, en su lugar, se instalen «barreras de protección segura para los conductores de motocicletas».
El diputado nacional del PSOE José Ramon Mateos se ha interesado por el asunto y, según explicó ayer a este periódico, se pondrá en contacto la semana que viene con el Ministerio de Fomento para conocer el estado de la propuesta y, por tanto, si el Gobierno tiene intención de adoptar algún tipo de medida. En este sentido, Mateos pide a la Conselleria insular de Carreteras que disponga una partida económica para hacer frente a una modificación del vallado de las carreteras de la isla. El diputado propone al menos la instalación de corcho en la parte baja de las barreras para evitar que los motoristas, en caso de accidente, pasen por debajo de las vallas, que es lo que, al actuar como una cuchilla, produce amputaciones.