El hospital Can Misses de Eivissa pagará 'peonadas' a los médicos para reducir la lista de espera quirúrgica ampliando la jornada laboral a las tardes. Las 'peonadas' son horas extras que se les remunera a los facultativos para hacer frente al aumento de la actividad asistencial registrada en el centro sanitario.
El gerente del Àrea de Salud de Eivissa y Formentera, Ignacio Martínez, no quiso hacer ayer ningún comentario acerca de este cambio en la organización interna del hospital, aunque sí precisó que Can Misses «ya hacía actividad por la tarde aunque ahora se va a hacer un poco más».
La decisión adoptada de aumentar la jornada laboral ha sido bien acogida por los médicos, ya que se trata de pacientes de Can Misses, «que no tienen que salir del hospital y son atendidos por los mismos médicos que los han visto en las consultas». En el caso de que no puedan ser asumidos por los facultativos del hospital, los pacientes serán desviados a la Policlínica del Rosario.
Desde hace unos meses se está produciendo un desvío de pacientes a la Policlínica del Rosario dentro de la política de la Conselleria de Salut que los pacientes no esperen más de seis meses para la espera quirúrgica.
El Sindicato Médico había manifestado su preocupación por esta política de desvío de pacientes y así lo manifestó a la consellera de Salut, Aina Castillo, en una reunión celebrada en junio. La consellera de Salut defendió en su última visita a Eivissa la política de los conciertos sanitarios entre la pública y la privada para reducir las listas de espera aunque precisó que si se han de aumentar las peonadas «se hará para que ningún ciudadano espere más de seis meses para ser intervenidos». Más de 200 pacientes han sido derivados de Can Misses a la Policlínica del Rosario para ser intervenidos a lo largo de este año.
Los últimos datos facilitados por la Conselleria de Salut acerca de la lista de espera quirúrgica, a fecha del 30 de septiembre, revelan que había 957 pacientes a la espera de una intervención quirúrgica. También se recogía que el hospital Can Misses presentaba las mejores cifras en cuanto a la relación de pacientes en lista de espera quirúrgica por 1.000 habitantes con 8,18 pacientes.