Jaume Matas no cortará ninguna cinta de inauguración cuando falten tres meses para las elecciones. El president del Govern se comprometió ayer a no hacer este tipo de actuaciones «electorales». «Queremos huir de actos de inauguración que a veces son improvisados y pueden llegar a dar una imagen de irresponsabilidad», afirmó Matas. Es la decisión a la que llegó el Govern en un encuentro celebrado en el Parc-BIT que sirvió para cerrar las reuniones de objetivos con los consellers.
Matas aseguró que el Govern no tiene «ni la necesidad ni la voluntad» de improvisar porque el trabajo ya está hecho «y el bagaje es claramente satisfactorio». Afirmó que la acción de Govern durante estos tres años se ha traducido en «hechos concretos». Las inauguraciones precipitadas «no conducen a nada y pueden ser contraproducentes» y como ejemplo de ello citó la inauguración de la línea de tren a Manacor, hecha por el Pacte de Progrés, «que fue desastrosa, con malas condiciones de seguridad y con problemas de retraso en los horarios».
«El metro es un proyecto tan potente que se inaugurará cuando esté listo», señaló Matas a modo de ejemplo. «A partir del 1 de marzo no habrá cortes de cinta y me gustaría que, en términos generales, se haga lo mismo en los ayuntamientos», afirmó.
El president aprovechó su comparecencia ante los medios de comunicación para hacer balance de lo que han sido estos tres años de gobierno. Citó las mejoras en las infraestructuras viarias, la mejora de la situación económica y el récord de recuperación de puestos de trabajo como algunos de sus logros. Aprovechó para destacar la importancia esencial que tendrá el nuevo Estatut en la financiación de Balears y admitió que el proyecto de autotasa no se pondrá en marcha si no existe acuerdo con el sector.