En la pequeña capilla de Cala Llonga se concentraban ayer muchas personas vecinas de esa localidad y un elevado número de turistas que se dieron cita cerca del mediodía para presenciar la misa solemne, celebrada con motivo de las fiestas de la localidad, la Assumpció de la Mare de Déu (reina del cielo y de la tierra, es decir, de toda la Creación).
Vicent, el párroco que ofició la misa, imitó el sonido de las campanas repicando, que anuncian el inicio de la misa (en la capilla de Cala Llonga no hay campanas), para señalar que la ceremonia estaba a punto de comenzar. Durante la homilía, el calor tuvo bastante importancia pues los árboles no cubrían la totalidad de la capilla, no obstante, el público escuchó atentamente todas las lecturas y oraciones.
Alrededor de la una del mediodía, el desfile de coches y motos antiguas recorrió una buena parte de la localidad captando la atención de los numerosos transeúntes que discurrían por las calles. Ya por la tarde, cerca de las 19 horas, dio comienzo el tradicional y conocido desfile de carros engalanados tras el cual turistas y residentes pudieron disfrutar de una exhibición de ball pagès. A partir de la medianoche, el cielo se vio cubierto de una explosión de luz, color y sonido.
M.J. Real