B. R.
El concejal de Urbanismo de Sant Josep, Josep Marí Ribes Reganes, anunció ayer que los apartamentos ilegales Pimar, ubicados en Port des Torrent, serán derribados antes de finalizar este mismo año.
De esta forma, el Ayuntamiento de Sant Josep descartó que la institución se niegue a tirar estos apartamentos ilegales, caso que se encuentra abierto desde hacer ahora ocho años: «Los procedimientos administrativos son largos y la propiedad intenta poner recursos, trabas e impedimentos, pero no nos ha hecho cambiar de idea en ningún momento sino que retrasan el proceso», indicó Reganes. De esta forma, el concejal de Urbanismo de Sant Josep señaló que existe un presupuesto solicitado a una empresa, para cuantificar el coste estipulado para el derribo de estos apartamentos: «El expediente sigue abierto, existen las sanciones y la orden de demolición, que si no la lleva a cabo la propiedad lo tenemos que hacer nosotros». Una vez que se presente el presupuesto solicitado, Reganes señaló que el servicio jurídico del Consistorio deberá marcar el procedimiento, en el que se deberá remitir una notificación: «No sé cuál es el procedimiento que se debe seguir exactamente pero necesitaremos una orden judicial para entrar en una propiedad privada», indicó Reganes. En 2002 el Ayuntamiento de Sant Josep abrió expediente de infracción que finalizó con una sanción de 184.000 euros a la propiedad. Dos años después, el Consistorio denunció ante el juez la rotura de los precintos de los 15 apartamentos existentes, ya que los dos restantes permanecían por aquel entonces ocupados por dos familias, que se negaron a abandonar las viviendas. Asimismo, la Conselleria de Turisme ya clausuró el edificio por las irregularidades y la polémica despertada ante la falta de licencia.