CONCHA ALCÀNTARA
El incumplimiento de las ordenanzas municipales ha supuesto que el Ayuntamiento de Sant Antoni haya interpuesto 55 expedientes sancionadores, precintado siete equipos musicales y, además, haya recibido 59 denuncias por música, 27 por incumplimiento de horarios, 750 por actividades relacionadas con el medio ambiente, como colocación de carteles, no limpiar las fachadas o reparto de tickets por personas no autorizados.
El concejal de Gobernación del Ayuntamiento de Sant Antoni, Joan Pantaleoni, dio a conocer ayer estos datos, que corresponden a este año aunque el 90 por ciento de los hechos se han concentrado durante el verano, en el transcurso del pleno extraordinario celebrado ayer, a instancias del Pacte, sobre la seguridad y el modelo turístico, que no se aprobó al no haber acuerdo, ya que el PP aceptaba la convocatoria de la comisión asesora de turismo pero no en la incorporación de técnicos especializados, como proponía el Pacte. Finalmente se rechazó con el voto en contra del Pacte y la abstención de Democracia Pitiusa.
La portavoz del grupo municipal progresista, Laura Carrascosa, pidió «un cambio del modelo turístico, pero se necesita voluntad política». Carrascosa incidió en las molestias que ocasionan a los vecinos el incumplimiento de las ordenanzas: «Hay 70 denuncias de vecinos, que están amargados y hartos porque se permiten actividades clandestinas, ya no saben como denunciar porque no les hacen caso», dijo en alusión a los ruidos y las molestias por los establecimientos de ocio, sobre todo en zonas de música como el West End y ses Variades. Carrascosa lamentó que el Ayuntamiento autorizara en las fiestas patronales actos como el de Cala Gració con música hasta altas horas de la madrugada. Pantaleoni pidió disculpas a los vecinos por las molestias y señaló que «quizás hubo una equivocación con la ubicación, pero ésa es la música que gusta a los jóvenes». En cuanto a las molestias vecinales, Pantaleoni aseguró que «se actúa como puede, insinúa preferencias pero, si tiene pruebas, denúncielo». El concejal añadió que con los medios con los que hay, un ingeniero, no se pueden revisar los proyectos y licencias otorgadas en locales de ocio que hayan sido denunciadas. «Podremos contratar a otro el año que viene». El Pacte pidió una revisión de proyectos para verificar que se ajustan a la licencia concedida. «Los desajustes producen las molestias a los vecinos. El PP no quiere verlo porque muchos de ellos tienen negocios de noche, aunque seguiremos insistiendo».