L a II Mostra de Cultura Popular de les Illes Balears que se clausuró ayer en Santa Eulària des Riu, contó durante toda la mañana con unos visitantes muy curiosos: los niños de los centros escolares de Eivissa y Formentera, que no pararon de formular preguntas a sus profesores sobre todo lo que se iban encontrando a su paso. Según los organizadores, más de 3.000 estudiantes se concentraron en la mañana de ayer en el corazón de la localidad para observar lo más selecto de la cultura y tradiciones de Eivissa, Formentera, Mallorca y Menorca. «En total han visitado la muestra 35.000 personas, de las que 3.000 han sido niños pertenecientes a centros escolares de Eivissa y 250 de Formentera, por lo que estamos muy satisfechos con la acogida que ha tenido la muestra», explicó el comisario del evento, Joan Pons, que añadió: «Se trata sobre todo de estudiantes de primaria, porque pensamos que serían los más interesados en ver los animales, los personajes de rondalla...».
En este sentido, los pequeños disfrutaron de una soleada mañana viendo de primera mano los antiguos carros tirados por caballos, las herramientas del campo y del mar y los productos artesanales y gastronómicos típicos de las Pitiüses. Una interesante iniciativa que ha permitido a los estudiantes conocer las raíces de nuestra tierra y, también, dar a conocer nuestras tradiciones a los estudiantes que vienen de fuera, por lo que también ha contado con el apoyo de los profesores: «Me ha parecido una muestra muy buena porque los niños son muy incrédulos y así tienen oportunidad de ver lo que han estudiado en los libros como, por ejemplo, la taula menorquina», comentó la profesora del colegio Sant Jordi Present Ortiz.
Sin embargo, lo que más expectación creó entre los pequeños fueron los simpáticos gegants, así como los personajes de rondalla que con sus narraciones y sus vestuarios captaron toda la atención de los pequeños. Tras la buena acogida del público pitiuso ya se habla de Menorca como próximo destino de la muestra para el próximo año.
I. L.