Los diputados del PSOE y del PP se acusaron ayer mutuamente de tener intereses electoralistas en la aprobación del nuevo Estatut d'Autonomia antes de los próximos comicios, después de que los socialistas hayan pedido un nuevo aplazamiento para presentar enmiendas. El diputado socialista, José Ramón Mateos, dijo que la intención del PP es aprobar el texto antes de la convocatoria de mayo porque «lo único que quiere es mover el mapa electoral por interés propio». «Ahora mismo, tal y como están de nerviosos, les da exactamente igual lo que ponga el Estatut siempre que se apruebe antes de las elecciones y siempre que en Eivissa haya 13 consellers, porque ellos piensan que así van a ganar», explicó Mateos. La reforma del Estatut contempla que ya no haya conseller por Formentera en el Consell de Eivissa, un escaño que en el 99 fue decisivo para la victoria de la izquierda en la máxima institución pitiusa.
El diputado del PP, Enrique Fajarnés, recordó que el PSOE siempre ha tenido reticencias a aprobar el nuevo Estatut y recordó que el PP sospecha que en la reunión mantenida el pasado martes en Madrid entre el secretario de Organización, José Blanco, y algunos miembros del PSIB como Francesc Antich, se habló de continuar pidiendo prórrogas para impedir la aprobación del texto en esta legislatura.
PP y PSOE también tienen diferentes opiniones sobre si el Consell de Formentera se puede poner en marcha si no hay convocatoria electoral de por medio. Fajarnés insiste en que si el nuevo Estatut no está listo antes de las elecciones habrá que esperar hasta el año 2011 para que los formenterenses puedan disfrutar de una mayor autonomía. Mateos, en cambio, considera que no hay ninguna traba para que, una vez aprobado el Estatut, aunque sea después de las elecciones, los concejales del Ayuntamiento de Formentera pasen a ser consellers de manera automática. La única diferencia estribaría en que el Consell de Eivissa contaría con el conseller por Formentera. «Habría un periodo transitorio, que personalmente creo que sería positivo para asumir todas las competencias y la infraestructura», aclara Mateos, que confía en que el Estatut esté aprobado antes de las elecciones.