GUILLERMO ROMANÍ
El portavoz del Grup Independents de Formentera, GUIF, Joan Robert Masdeu, acusó ayer al alcalde de la isla, Isidor Torres y a la coalición que forma el equipo de gobierno, COP y PREF, de incurrir en la ilegalidad al querer prorrogar hasta las elecciones de mayo los presupuestos de 2006 aunque introduciendo pequeñas modificaciones.
Masdeu señaló que de acuerdo con el artículo 168.1 del texto refundido de la Ley de Haciendas Locales y el artículo 168.4 de la misma queda claro que es una decisión «completamente ilegal la tomada por el alcalde ya que una prórroga se prevé como un hecho excepcional no querido, para comienzos de año pero no como decisión estructural de final de legislatura».
«La excusa de no querer comprometer económicamente la nueva Corporación para el ejercicio de 2007 y de facilitarle las cosas es totalmente falsa porque lo que tiene que hacer el Ayuntamiento es comenzar a preparar el camino, el mínimo imprescindible, para contar con medios adicionales una vez se constituya el nuevo Consell de Formentera».
Desde el GUIF aseguran que si no hay nuevos presupuestos «la parálisis institucional será evidente, en particular por lo que se refiere a los recursos humanos a los que se debería comenzar a contratar desde ahora mediante la correspondiente oferta pública de ocupación según las necesidades porque de lo contrario, todo el proceso se demorará meses y cuatrimestres», enfatizando el portavoz de los independientes que «no habrá servido de nada contar con un Consell Insular si todo queda paralizado y sin vida». El GUIF exige al actual equipo municipal que «comience a prever contrataciones de personal y adquisición de material en una cantidad ponderada, pero proporcional, a las necesidades que a partir del mes de julio comenzarán a existir» y al mismo tiempo señalan que en ese momento «no habrá a quien recurrir para que nos saque las castañas del fuego». Para Masdeu «este equipo de Gobierno no ha hecho nada por Formentera, ni tan siquiera inversiones importantes, y ahora tiene la poca vergüenza de decidir no preparar el camino hacia el futuro cuando por poco que hiciera ya sería más de lo que hasta ahora ha hecho».