El Ayuntamiento de Formentera, a través del concejal de Medio Ambiente, José Ramón Mateos, ha hecho pública su gran preocupación por las obras que está realizando el Ibasan, dependiente del Govern, en la estación de bombeo de es Pujols, señalando que «las obras no se están llevando a cabo de acuerdo con el proyecto presentado en su día». La preocupación no reside en las consecuencias del cambio de sistema ya que, para Mateos, «hay varios aspectos sumamente preocupantes que nos ha transmitido la empresa Aqualia y se corroboran en el informe de los servicios técnicos del Consistorio». «Hay serias deficiencias en cómo se están haciendo los trabajos», añadió.
Tras remarcar que la obra no se ejecuta según el proyecto, Mateos afirmó que el nuevo sistema «dará más problemas de los que ya hay», y recordó que el proyecto inicial era que todas las arquetas de aguas residuales de es Pujols iban a un único punto de bombeo, mientras que ahora se hace un paso de arqueta a arqueta y finalmente a un punto de bombeo con una capacidad muy inferior del existente. Hasta tal punto que, según el concejal, si hoy se dispone de una capacidad de 58 metros cúbicos de aguas residuales, el futuro tendrá apenas ocho. Esto implicará, dijo Mateos, que «si hasta ahora cuando había atascos o exceso de trabajo, teníamos un tiempo de reacción de aproximadamente una hora antes de que las aguas residuales vertieran por las alcantarillas, en especial en el Paseo Marítimo de es Pujols, con el nuevo sistema, si se mantiene, el tiempo de reacción es prácticamente nulo, apenas cinco minutos según los servicios técnicos municipales».