GUILLERMO ROMANÍ
María Teresa Fernández de la Vega, vicepresidenta del Gobierno español, aseguró ayer que el Ejecutivo revisará la actual delimitación del dominio público marítimo-terrestre de Formentera y que el nuevo será «un deslinde justo», incluido dentro del «proyecto de progreso que estamos llevando a cabo en España».
La vicepresidenta dejó para el final la mención del deslinde, hasta el punto de que mucho pensaban que no iba a mencionarlo, pero fue prácticamente su última propuesta la más concreta referida a la Pitiusa Menor, que la mayoría de los existentes esperaban oír en boca de Fernández de la Vega. «Vamos a hacer un deslinde justo y lo vamos a hacer porque siemjpre cumplimos nuestros compromisos y nuestra palabra».
Al finalizar el acto electoral los máximos representantes de la Plataforma de Afectados por el Deslinde de Formentera, Gabriela Mayans y Vicent Tur, pudieron hablar con Ferández de la Vega a la que entregaron un dossier relacionado con el Deslinde de Costas, con estudios de su impacto en la la sociedad y en la isla de Formentera y la vicepresidenta se comprometió a actuar de forma clara e inmediata para resolver de una vez por todas el problema.
La vicepresidenta del Gobierno español destacó en su alocución, ante cerca de tres centenares de personas como auditorio, su «satisfacción, alegría y orgullo» al oír que los candidatos socialistas hablan «de las personas, de las necesidades de la gente, de ciudades más habitables y del entorno, de los jóvenes y de la televisión pública, de las cosas que preocupan a la gente y no de lo que interesa a unos pocos». «Porque al PP no le gusta hablar de de economía, de la educación o la sanidad, de empleo o servicios sociales. Es un raca-raca, estruendo para que no se oiga , no se conozca la política que estramos haciendo y así inventan ficciones, mentiras, fantasías y han acabdo perdiendo el sentido de la realidad», dijo Fernández de la Vega, que aseguró que «no da igual quién gobierne; es muy diferente que gobierne la derecha o la izquierda, y lo hemos visto aquí, en Balears, con lo que ha pasado en los últimos tiempos», para señalar que en los últimos tiempos se ha construido en la isla más que en toda su historia y que el cemento ha pasado a ser el principal motor de las islas cuando antes era el turismo.
«Si ganan -dijo la vicepresidenta del Gobierno-, acabarán alicatando las playas de Formentera». El final de la alocuación de la vicepresidenta fue significartiva «el futuro es el próximo 27 de mayo y está en vuestras manos porque es la única manera de defender el proyecto de progreso que estamos llevando a cabo desde el partido socialista», destacando la necesidad de hacer de ella «una isla pretegida ambientalmente y que cuide su encanto, su entorno y, al mismo tiempo, puede ser un referente del turismo respetuoso».