Los resultados de las elecciones celebradas ayer han supuesto un vuelco crucial en la correlación de fuerzas entre los progresistas y los conservadores que han presentado una paradoja, la izquierda, encabezada por Gent per Formentera y Jaume Ferrer, partido de nuevo cuño, avasalló al PSOE liderado por Bartolo Ferrer en las elecciones muncipales, al Ayuntamiento/Consell, mientras que al Parlament de les Illes Balears, los formenterenses se han decantado por el candidato conservador, Pep Mayans, respaldado por PP y GUIF. El primer análisis del nuevo panorama es obvio, irrupción ganadora de GxF, debacle del PSOE por la izquierda y bajada sustancial del GUIF mientras que el PP sube un escaño y por primera vez en la historia supera a los socialistas en número de votos.
Jaume Ferrer, líder de Gent per Formentera, se mostraba cauto dentro del ambiente exultante con el que los miembros de su partido habían recibido los resultados electorales: «Qué valoración puedo hacer si somos el último partido en llegar y al mismo tiempo hemos conseguido ser la lista más votada, queríamos serlo y lo hemos conseguido». Ferrer avanzó que a la hora de pactar, imprescindible para llegar a un gobierno estable, «la primera opción es hacerlo con el PSOE y mañana (hoy para el lector) tendremos una reunión interna para valorar los resultados por lo positivos que son, pero al mismo tiempo para ver qué decisión se toima empezando por hablar con el PSOE porque sería muy importante llegar a un pacto progresista que sea fuerte y dé estabilidad al futuro equipo de gobienro del Ayuntamiento/Consell». Ferrer reconoció que los cinco concejales obtenidoes había superado en sus previsiones.