La Oficina de Defensa de Derechos del Menor, entre cuyas funciones figura la de supervisar a las administraciones públicas y entidades privadas que prestan servicios a los menores de las Islas, ha atendido nueve casos en Eivissa durante el año pasado.
El porcentaje más elevado de casos corresponde a Mallorca (315), un 86 por ciento del total, frente a los nueve de Eivissa y uno de Formentera. La proximidad sigue siendo un factor clave en este servicio ya que la Oficina se encuentra en Palma.
La tipología de las situaciones atendidas es muy variada y afecta, sobre todo, a aspectos relacionados con la integración social y protección jurídica, el 45'65 por ciento de la demanda, en problemas como desatención, absentismo, problemas de comunicación dentro de la familia, entre otros; educación y cultura, que representa el 20'46% de los casos, entre los que figuran conflictos con el centro educativo, publicidad y venta de bebida alcohólicas; la salud y los maltratos, con 120 casos, como el acoso escolar o bullyng, y los malos tratos físicos producidos por adultos, psíquicos o emocionales y abusos sexuales.
En tareas de coordinación interdepartamental en temas y materias relacionadas con los menores y sus derechos, la Oficina del Menor estableció líneas de actuación con los ayuntamientos de Eivissa, Sant Josep y Formentera así como con el Consell, d'Eivissa. Entre los desplazamientos realizados a Eivissa figura una visita al centro de menores Mare del Remei de Santa Eulària. Entre sus sugerencias figura la necesidad de crear un recurso para atender a la población adolescente con problemas de conducta y que se potencien recursos como los «punts de trobada» para facilitar el intercambio de niños hijos de padres separados e incrementar recursos para la salud mental infantil y juvenil, ya que asegura que aún no tiene la dotación ni la infraestructura adecuada en las Islas para atender de forma adecuada a los niños y jóvenes de Balears.