El inicio oficial de la temporada turística en mayo ha conseguido rebajar en 900 inscritos el número de parados registrados en las listas del Servei d'Ocupació de les Illes Balears (SOIB) pero el empuje del sector servicios el pasado mes no ha sido suficiente para evitar que el número de desempleados en las Pitiüses fuera 4.660 personas (4.461 en Eivissa y 199 en Formentera), casi mil más que en el mismo mes de 2007 (un 26,7% más).
El número de contratos registrados sigue la misma tendencia general, con 440 acuerdos formalizados menos que hace 12 meses. En este apartado destaca el hecho excepcional de que Formentera sea la única isla en que crece la contratación interanual, con 809 contratos, 95 más que en mayo de 2007.
Como se viene observando en los últimos meses, la construcción mantiene una tendencia a la destrucción de empleo. En mayo había más de 1.230 parados dentro de este sector, casi el doble que doce meses antes (600 parados más) y 180 más desempleados que en abril de este año.
El sector terciario es el que más personal absorbió el pasado mes, con casi 1.100 parados menos que en el mes de mayo, pero esta circunstancia no ha impedido que sigan en el paro 3.140 trabajadores pertenecientes a esta actividad, 320 más que el pasado año.
Dentro de este segmento, el subsector de la hostelería mantiene 996 personas en el paro, una menos que en el mismo mes del pasado ejercicio. Respecto a abril la diferencia sí que es positiva, con 600 personas menos inscritas en el SOIB.
Menos paro femenino
La evolución del paro femenino es claramente mejor que la del masculino y deja mayo con un menor número de mujeres que de hombres dentro del SOIB (2.160 frente a 2.500).
En el caso del desempleo femenino, éste registró 775 paradas menos que en el mes anterior y 130 mujeres más sin trabajo que en mayo de 2007. En cambio, los registros del sector masculino reflejan que entre abril y mayo sólo había 130 parados menos mientras que respecto a doce meses antes se había producido un ascenso de 850 desempleados.
Por edades, el paro en los menores de 25 años se sitúa en 690 personas, 115 más que en el mismo mes del ejercicio precedente pero 170 menos que en abril de este año.
Los datos del paro hechos públicos ayer han despertado preocupación entre sindicatos y patronales, que destacan que estos resultados destacan la dependencia de la economía pitiusa del turismo y, especialmente, de la temporada alta.
«Muchos empresarios no tienen ninguna certeza sobre la evolución que va a seguir la economía, con un Producto Interior Bruto a la baja y los principales emisores de turistas también afectados», explica Enric Moreno, director territorial en las Pitiüses de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears (CAEB).
«Si a esto unimos el que la Semana Santa se adelantara, rompiendo la dinámica de aperturas, y con una climatología que ha limitado las reservas de última hora, encontramos que muchos empresarios se contienen, limitando las contrataciones de junio a septiembre», añadió.
Moreno también apuntó la imposibilidad de que la hostelería absorba el paro de la construcción, tal y como algunos analistas esperaban. En este punto coincidió Felipe Zarco, de Comisiones Obreras en las Pitiüses.
«El sector servicios podrá subir un poco pero ya tiene bastante con mantener su nivel. En el caso de la construcción estamos viendo algo que ya se preveía y que se debe solucionar con medidas que eleven la actividad dentro del sector, actuando en la rehabilitación de edificios, un campo en el que hay bastante por hacer en las Pitiüses», aseguró.
Por su parte, Diego Ruiz explicó que desde UGT no quieren precipitarse en la valoración de la situación y que deben analizar en profundidad los datos y la situación, «pero, obviamente, cualquier situación en la que aumente el paro es muy negativa y la vemos con preocupación».