El Consell de Formentera instaló el pasado martes dos carteles en los que se recuerda a los visitantes y a los residentes que está prohibido bañarse en el pequeño puerto de es Caló, pero lo ha hecho con tan poco acierto que ha colocado dichas advertencias en los lugares menos adecuados.
Ayer por la mañana el conseller de Infraestructuras y responsable asimismo de Pesca, Bartolo Ferrer, anunciaba que se habían colocado dos carteles en es Caló para recordar a visitantes y residentes que en la zona del puerto está totalmente prohibido el baño «es un puerto pequeño, cierto, pero pertenece al ministerio de Medio Ambiente y aunque nunca ha habido ningún tipo de señalización indicando la prohibición de baño en la zona y por ser un lugar turístico -dijo Ferrer-, los visitantes se bañaban en él sin ningún problema, la realidad es que de acuerdo con la ley, está totalmente prohibido el baño en zona portuaria por pequeña que sea ya que entraña un grave peligro para los bañistas en un punto de entrada y salida de embarcaciones».
Para Ferrer era imprescindible que antes de que sucediera un accidente grave se colocaran dos señales indicando de la prohibición de baño en dicha zona y recordó la preocupación mostrada desde hace tiempo por los pescadores artesanales que tienen sus embarcaciones en las casetas varadero de es Caló ante los problemas que esporádicamente surgían cuando entran y salen embarcaciones y hay niños y adultos nadando en la estrecha bocana o junto a las escalas de las casetas varadero.
Por su parte el, Patrón Mayor de la Cofradía de Pescadores de Formentera, Josep Juan Torres, que justamente tiene su barca en es Caló, señaló que «es un tema muy viejo, hace ya cuatro o cinco años que estamos reivindicando que se coloque algún tipo de señalización para recordar que es un puerto, lugar de entrada y salida de barcas, y eso viene motivado porque hace cuatro o cinco años hubo dos accidentes ya que cuando entran o salen las barcas, los chavales se tiran al agua delante de las barcas y en un caso el pescador tuvo que embestir el muelle y en otro subirse a las rocas para evitar arrollar a los nadadores».
Las señales se han colocado en la zona posterioir de las casetas varadero en el camino de tierra que comunica es Caló con ses Platgetes, pero por desgracia ese no es el lugar de acceso habitual de los bañistas a las aguas del puerto de es Caló ya que los puntos habitualmente utilizados se sitúan entre las priumeras casas bajando por una rampa, antes de llegar a las señales de advertencia, pero sobre todo desde el propio muelle. El acceso directo al agua es a través de la plataforma de hormigón de es Mollet que está al final de la calle que llega a los restaurantes situados junto al agua; ahí hay una cadena que tuvo que colocarse para que los motorinos, bicicletas quads e incluso coches no estacionaran en dicho punto. Pese a ello los turistas cruzan la cadena y luego muchos de ellos se zambullen directamente en la bocana de entrada de es Caló y los que desde barcos fondeados en el litoral amarran con sus zodiacs en es Mollet, hacen lo propio ya que el agua invita a ello. Sin embargo no hay señalización alguna al respecto.