La propuesta de reordenación del puerto de Vila que defenderá Eivissa pel Canvi ante el PSOE, al que intentarán convencer para que 'obligue' a la Autoritat Portuària a modificar el actual planteamiento, contempla una superficie neta de explanada de carga rodada de 35.600 metros cuadrados en la zona del muelle norte, junto a la Cofradía de pescadores. Es allí donde se construiría una estación marítima para el tráfico con la península y un aparcamiento donde se situarían los vehículos para embarcar. Esta superficie se conseguiría ganando terreno al mar, pero en una cantidad muy inferior a la que prevé Autoritat Portuària en el dique de Botafoc, donde se quiere construir una explanada de 85.000 metros cuadrados. Sin embargo, en el proyecto de ExC sólo se prevé ganar 28.500 m2 al espejo de aguas. Esto se conseguirá con la desaparición de parte de Ibiza Nueva y con el relleno de zonas libres del muelle norte. De esta forma, el dragado que hay que hacer es prácticamente mínimo, frente a los 660.000 metros cúbicos de fangos que hay que extraer con el proyecto de Autoritat Portuària.
Según los cálculos del equipo técnico externo que ha hecho el proyecto para Eivissa pel Canvi, la capacidad de carga y pasaje sería el doble de lo que hay con el actual. «Si dicen que es un puerto con poca capacidad se desmiente por sí solo», explicó un portavoz de ExC, que destacó que en esta zona se contemplan cinco puntos de atraque estudiados por ingenieros que conocen «cuáles son los barcos que habrá en el futuro».
En la Marina se dejarían los buques de pasajeros de Formentera, pero sin carga rodada, y en la zona del muro se habilitaría uno de los atraques de cruceros. La mitad del actual puerto de Ibiza Nueva se trasladaría a la zona del dique de Botafoc, donde hay más capacidad, igual que el de Marina Ibiza (situado actualmente en la Marina). Para ello, habría que instalar mil metros cuadrados de pantalanes fijos de hormigón y 15.613 metros cuadrados de placas procesadas de hormigón. Más adelante, en el dique, se situarían los cruceros. Con esta reordenación, según defiende ExC, se ganarían además numerosos amarres dentro del mismo puerto, lo que concuerda con su «política de no construir más puertos deportivos».
Reacción del PSOE
«El proyecto está estudiado en profundidad y hay un informe sobre maniobrabilidad, corrientes de agua, etc», recordaron desde Eivissa pel Canvi, donde remarcan que el presupuesto de obra civil de esta reordenación sería tan sólo de 18'8 millones de euros, en comparación con los 70 millones que prevé gastar Autoritat Portuària en las plataformas de Botafoc.
Los ochenta integrantes de la asamblea de Eivissa pel Canvi decidieron por mayoría (dos tercios) apostar por este nuevo proyecto y por eso, a partir de ahora, es el que defenderán ante el PSOE. De esta forma, rechazan seguir negociando una reducción de la plataforma de Botafoc. Eivissa pel Canvi tiene un estudio en el que se asegura que es posible reducir en 25.000 metros cuadrados la plataforma ganada al mar, con lo que quedaría una explanada de 66.000 metros cuadrados. Sin embargo, no se ha concretado en cuánto se podría reducir el presupuesto.
Desde el PSOE no quisieron ayer pronunciarse sobre esta decisión de sus socios de gobierno. La portavoz Laura Carrascosa aseguró que prefieren esperar a la reunión de la ejecutiva que celebrarán el lunes. Tampoco desde el Consell quisieron hablar sobre esta cuestión sin haber consensuado una postura común.
ExC quiere «convencer» al PSOE pero no romper Desde Eivissa pel Canvi aseguran que no se plantean romper ningún pacto. Simplemente intentarán «convencer» al PSOE con argumentos técnicos de que este proyecto es el mejor y que todavía es factible llevarlo a cabo. Según ExC, las negociaciones mantenidas hasta ahora con Autoritat Portuària no han arrojado resultados. «No sabemos si realmente quieren reducir algo, porque por ahora no nos han presentado ninguna propuesta y existe la sensación de que nos están mareando», explicó un portavoz de la formación, que indicó que no están rompiendo ningún pacto con el PSOE porque en el acuerdo preelectoral que firmaron se incluía la posibilidad de redimensionar el proyecto. «Siempre hemos dicho que lo estudiaríamos y ahora lo hemos hecho», remarcaron las mismas fuentes, que creen que no es «aceptable» que se continúe con el proyecto que en su día hizo el PP. Desde ExC están convencidos de que todavía se puede parar el proyecto actual, porque, aunque ya cuente con la tramitación medioambiental, el Plan de Usos todavía no está aprobado definitivamente. Además, consideran que todavía se puede renegociar la concesión de Ibiza Nueva para que se trasladen al dique. Preguntados por el retraso que supondría un cambio de proyecto, desde Eivissa pel Canvi argumentan que si se redujeran las plataformas también se retrasarán las obras. Además, una obra con menos dragado tendría un periodo de ejecución más reducido. En ExC ya han solicitado una reunión con el presidente del Govern, Francesc Antich, para abordar esta cuestión y así intentar que el Ejecutivo autonómico se replantee un posicionamiento distinto ante este proyecto, uno de los de mayor envergadura de los que ha vivido la isla.