os meses de verano suelen ser caóticos. El ritmo frenético de la vida diaria, las prisas por llegar siempre a la hora, el calor y el gentío que transita por las calles, bares y restaurantes suele aumentar el nivel de despiste de las personas. Así, durante julio y agosto la sección de objetos perdidos de la Policía Local de Eivissa recibe un gran número de artículos encontrados en las calles, bares, supermercados, parques y demás establecimientos comerciales de la isla. Así, en julio, agosto y estas dos semanas de septiembre se han registrado 1.326 objetos de los que han sido devueltos hasta el momento 1.026. «Septiembre también es un mes en el que recibimos muchos objetos perdidos, pero a partir de la semana que viene parece que todo se calmará un poco», explica Joaquín Arruga, el policía local que se encarga de poner en orden todos los artículos que reciben diariamente en las instalaciones de este cuerpo de seguridad.
Según cuenta, se dedica a esta tarea desde hace muchos años, por lo que conoce muy bien los objetos que más se repiten: «Generalmente suelen ser carteras con documentación, gafas de sol graduadas porque las que no lo son no las suelen traer, cámaras digitales, relojes y llaves», explica Joaquín, quien recomienda fervientemente extremar la atención cuando la persona se encuentra sumida en las aglomeraciones de gente que pueden producirse en el verano ibicenco: «Sobre todo en las paradas de autobuses y la playa, que son los lugares donde se producen más hurtos». En este sentido, lo que más roban son las carteras: «En cuanto abres el monedero te das cuenta si ha sido robado o no, pues si ves que está todo revuelto es porque han estado buscando dinero y han devuelto la documentación». Así, los documentos identificativos de turistas y residentes son otro de los artículos que más recibe esta policía. «Una vez que los documentos se encuentran en las instalaciones de la policía se envían a los domicilios, si se trata de personas del municipio, o bien se transfieren a consulados y embajadas para que se pongan en contacto con sus ciudadanos», explica Joaquín.
En estas instalaciones también se guardan los objetos que los agentes decomisan: «Lo que se tiene que destruir se destruye, como en el caso de los cd's copiados, y lo que es material recuperable, como los instrumentos musicales, se guarda pagan la multa y se les devuelve».
María José Real