rrebato y arrepentimiento, título de la obra ganadora del 2º Concurso de Fotografía Digital de Santa Eulària, «habla precisamente de la juventud, el tema del certamen, ya que tenemos mucho apego a objetos como los móviles y sería difícil tirarlo al agua por un arrebato, claro que luego llegaría el arrepentimiento. También es un acto de rebeldía, algo muy propio de los jóvenes», explicó el ganador del concurso, Santiago Descalzo. Para conseguir la imagen resultante «lo que hice fue lanzar el teléfono móvil dentro de una pecera con agua. Hice muchas fotos usando el proceso ensayo-error y con el photoshop eliminé los bordes de la pecera para que no se apreciaran en la imagen», explicó Santiago Descalzo. Su premio asciende a la cantidad de 300 euros que asegura gastará en material fotográfico. Este joven afirma que gracias a su afición a la fotografía «he creado el Ibizafoto Club, que a través de su blog (http://ibizafotoclub.blogspot.com) da a conocer todas las actividades que suceden en Eivissa relacionadas con este arte. Además esta asociación está organizando varios cursos de fotografía», comentó. Como anécdota, el pasado 25 de septiembre cuando Salvador Losa, regidor de Juventut de este ayuntamiento le hizo entrega del premio y posó con la foto «sin darme cuenta, la mostré al revés», confesó. Además considera que su participación en los concursos le lleva a desafiarse a sí mismo y se lo toma como un importante reto personal al que cada vez dedica más tiempo.
Por su parte, Reposo en sal, de Guadalupe Ana de Aldecoa, se alzó con el segundo premio por el que su autora recibirá 200 euros. «Invertiré el dinero en comprar un objetivo nuevo o algo de material», comentó. Para ella esta obra «habla de la juventud ya que estar tumbado contemplando el cielo se puede identificar con el paso hacia una actitud más adulta, ya que la juventud es viaje hacia la madurez», explicó acerca de por qué presentó esta imagen. Para esta joven haber ganado este certamen fotográfico «es muy gratificante ya ahora mismo atravieso un periodo en el que quiero dedicarle más tiempo a esta actividad artística que es una pasión importante en mi vida», afirmó. La foto está tomada a 3.500 metros de altura en el salar de Usuny en Bolivia. «Se trata de un lugar muy energético y creo que eso se ve en la imagen», expresó. El tercer premio de este certamen se declaró desierto por el jurado.
N. Salazar
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