JUAN MESTRE
En tiempos de crisis económica, el Govern ha decidido presentar unos Presupuestos calificados por el conseller Carles Manera como «anticíclicos», que intentarán compensar la actual situación de recesión con inversiones, menos gasto corriente y congelación de sueldos de altos cargos, además de recurrir a la deuda.
Los Presupuestos para el próximo año ascienden a 3.558,9 millones de euros, con un incremento de deuda de 662 millones, lo que obligará al Govern a presentar ante el Consejo Económico y Fiscal un nuevo plan de saneamiento financiero.
Al informar de los acuerdos del Consell de Govern, el pasado viernes, Antich destacó que el anteproyecto de Presupuestos se ha ejecutado «con el compromiso de cumplir tres objetivos básicos: austeridad máxima del gasto, mantenimiento de la inversión pública para reactivar la economía y aumentar la ocupación, y hacer política social».
66% para política social
Los presupuestos suponen un incremento del 7 por ciento respecto al actual ejercicio y contemplan que el 66 por ciento del total se destine en políticas sociales. El Govern prevé que un total de 2.350 millones se destinarán a actuaciones sociales, educativas, sanitarias, vivienda y ocupación. También se apuesta por el transporte público.
El proyecto de ley de presupuestos, que será registrado en el Parlament el próximo 29 de octubre, están marcados por la inestabilidad económica de los mercados financieros internacionales, que ha derivado en una desaceleración en el consumo e inversión privadas. Por lo tanto, se recurre a un mayor endeudamiento, aunque el volumen de deuda se reducirá de forma significativa en incorporar los recursos procedentes del nuevo modelo de financiación autonómica. Antich se mostró confiado en que Balears se beneficiará del nuevo sistema de financiación, cuya negociación sigue en punto muerto.
Entre algunas de las partidas del presupuesto, Manera resaltó que se destinarán 64,5 millones a I+D+I y 65 millones a la Universitat balear.
Con el fin de mantener las inversiones se destinarán 732,2 millones de euros, que representa el 2,56 por ciento del Producto Interior Bruto de Balears y se mantiene el mismo volumen inversor que el año anterior. Los gastos corrientes, en cambio, bajan un 2,5 por ciento.
El Ejecutivo ha tenido que recurrir al endeudamiento debido a la reducción de ingresos en un 10 por ciento, aunque en la propia ley se incluirá un artículo que concretará que la deuda se reducirá cuando lleguen nuevos ingresos del nuevo sistema de financiación. En este sentido, Manera destacó que se ha producido una reducción de hasta un 40 por ciento en los ingresos de los impuestos vinculados al sector inmobiliario (Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados) pero que otros impuestos como el IRPF y el IVA mantienen una buena dinámica.
Ley de acompañamiento
Manera ha reseñado que las distintas partidas «recogen los consensos alcanzados en distintas submesas del Pacto por la Competitividad», puesto en marcha el pasado mes de septiembre.
El conseller ha anunciado que el anteproyecto de ley de Presupuestos no lleva Ley de Acompañamiento, «queda eliminada en el ejercicio 2009».
«Como dijimos el año pasado la mejor Ley de Acompañamiento es la que no existe y los presupuestos se plantean de forma clara y sin subterfugios como los que se han podido utilizar en otros momentos», declaró el titular de Economía.