La muerte siempre ha sido un tema muy recurrido por los artistas de todas las disciplinas y de todas las épocas. Lo que, quizá, ha hecho destacar a unos y a otros ha sido el enfoque y la forma de presentar a los difuntos. Unos, bajo el prisma del horror que produce abandonar la vida han elaborado sus piezas artísticas. Como es el caso de Jesús de Miguel que amenizará la fiesta Rock Nights de esta noche, Diablos vs Calaveras, con unos visuales en los que utiliza imágenes de películas antiguas. «Dan miedo pero no son muy terroríficas. Es algo así como un homenaje a las películas de los años 60 y 70 con un aire antiguo. Un homenaje a cineastas como Jess Franco», explicó Jesús de Miguel acerca de la fuente de inspiración para estos visuales. Otros, bajo un punto de vista más alegre, tomándose la muerte, como un motivo que celebrar. Este es el caso de Ritxi Óstariz, que hoy por primera vez en Eivissa presentará en este evento su pieza ¡Viva calaca! De estética Burtoniana e influenciada por la manera en que viven y sienten la muerte en México ha elaborado una especie de vídeo clip con la música del artista americano Voltaire. «Es una pieza personal en la que hay mucho colorido y diversión. Se da en un momento una explosión en la que se celebra el día de los muertos, como las fiestas que hacen ese día los mexicanos», explicó Ritxi Óstariz. Las ilustraciones, la animación y el montaje son obras suyas y afirma que le llevó elaborar los tres minutos de duración alrededor de un mes dedicándose por completo a ello. Esta pieza ha sido presentada en varios festivales y concursos y el artista asegura que «ahora la solicitan muchos profesores que quieren mostrársela a sus alumnos y otras personas se han dirigido a mi para proyectarla en otro circuitos», añadió.
En el Rock Nights de hoy no sólo se celebrará la noche de los muertos de una manera visual sino que se contará con la participación de varios djs. A los habituales como Daisy Heartbraker, Marcos Torres, Lost Angeles o Colin Peters se le suma Jorge Gamecards 666, que promete un set musical en el que se combina el garage con la psicodelia, el surf o los clásicos del mundo del rock. Una noche para recordar a los difuntos a ritmo rockero.