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Sant Josep reconoce que realiza obras en Cala de Bou sin autorización de Costas

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La concejala de Turismo, María Àngeles Mostazo, reconoció ayer que el Ayuntamiento de Sant Josep realiza obras en una zona afectada por Demarcación de Costas, en Cala de Bou, sin el permiso correspondiente.

Las obras forman parte de los trabajos previstos para el último tramo del Pla de Excel·lencia y corresponden a un sector de la calle de Cala de Bou. Mostazo explicó que «en vista de la urgencia» decidieron seguir con las obras tras comunicar «verbalmente» a Costas que se comenzarían los trabajos a pesar de no contar con la autorización escrita. «Verbalmente nos han dicho que ejecutáramos», apuntó Mostazo, que no ha sabido responder si el Ayuntamiento deberá responder a multas por no contar con el preceptivo permiso.

La urgencia se debe a que si las obras no están terminadas para fin de año, Sant Josep perderá las subvenciones del Estado y del Govern para pagar los trabajos de Cala de Bou.

Mostazo hizo estas declaraciones tras la sesión plenaria de ayer, en la que también se aprobaron diferentes cambios para el proyecto del Pla de Excel·lencia, que incluirán la supresión de 32 jardineras, de cuatro merenderos, dos aparcamientos para bicicletas, dos contenedores soterrados y diez marquesinas. También se hará doble sentido el tramo de la calle Cala de Bou comprendido entre las calles Madrid y Albacete, una decisión que, según Mostazo, surgió del acuerdo entre los alcaldes de Sant Josep y Sant Antoni. El último cambio, que también afecta a este tramo de la calle, será sustituir el adoquinado previsto en la acera sur por hormigón impreso.

La oposición criticó estos cambios y votó en contra de la decisión del equipo de gobierno porque, según el concejal popular Vicent Torres, «no hay ningún informe técnico que diga si es conveniente o no hacerlo». «Parece un capricho del equipo de gobierno y son decisiones que se toman en contra de las asociaciones representadas en la comisión del Pla de Excel·lencia», apuntó Torres, quien criticó también que la obra «se ejecute de forma ilegal, sin el permiso de Costas».

La concejala Mostazo destacó que los cambios cuentan «con el aval verbal de un técnico» y que sirven para realizar mejoras. En este sentido, Mostazo puso como ejemplo el caso de las jardineras, que dificultan la visión y fluidez del tráfico, o el del hormigón impreso «que queda muy parecido al adoquinado, es más sencillo y más barato».

Por otra parte, el edil de la oposición solicitó que el ahorro que supondrán todos estos cambios se dedique a retomar el proyecto de la plaza de S'Olí, una propuesta que no encontró el apoyo del equipo de gobierno, ya que, según Mostazo, el dinero que se ahorrará servirá para cubrir otros gastos provocados por distintas «deficiencias que se han encontrado en las obras».

El Ayuntamiento también aprobó ayer ceder 400 metros cuadrados más de terreno a la Conselleria de Educació i Cultura con el fin de que la futura escoleta pueda contar además con comedor, y dos aulas más, una de ellas dedicada a la psicomotricidad. Este nuevo espacio se suma al terreno que ya fue cedido por el Consistorio y que supone unos 1.200 metros cuadrados, dedicado a la construcción de escoleta, que podrá dar cobertura a 64 niños del municipio.

La oposición apoyó la decisión Consistorial, aunque criticó la falta de planificación. En este sentido, la portavoz Encarna Castro señaló que «se tendría que demandar un proyecto o saber la estructura que va a tener la escoleta antes de demandar metros», porque, según señaló, «esto conllevará un retraso de seis a ocho meses». Por su parte, la concejala de Política Educativa, Marí Ribas, explicó que los proyectos los hace el Consell o el Govern, y que, aunque traerá un poco de retraso, su construcción está prevista para 2009.

Durante el pleno de ayer se aprobó también una subida del 3,5% para los impuestos de vehículo de tracción mecánica, un aumento que, según la concejala de Gobernación, Paquita Ribas, «es un poco menor que lo que ha subido el IPC». La oposición también votó en contra de esta medida, porque, según Torres, «perjudicará mucho a las empresas de alquiler de coches, en un momento muy poco oportuno». Otra subida, también prevista para el 2009, es del impuesto de recogida de basuras, que aumentará un 2,19%.

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