Jaume Escandell Ferrer (Eivissa, 06-12-1992) es uno de esos portentos de la naturaleza capaces de brillar al máximo en deportes diferentes, un híbrido de habilidades difícil de encontrar. El pitiuso es todo un fenómeno tanto en karate como en kendo, dos artes marciales que «no tienen nada que ver», como él mismo indicó. En karate llegó a ser cuarto en el Campeonato de España y en kendo se proclamó subcampeón nacional júnior hace dos fines de semana. Casi nada.
El de la Agrupación Kendo Pitiusas empezó a hacer karate a los cinco años. Escandell recuerda que «no sabía ni lo que era, pero mi tío lo practicaba y, un día, me dijo que fuera a verlo. Me gustó y empecé a aprenderlo». Este cinturón negro, que se entrena dos horas diarias durante cuatro días a la semana en el club Samyd, se ha fijado como meta para este año «conseguir el Campeonato de España júnior y la clasificación para el Europeo». Ambición no le falta a este joven, que también desea sacarse una espinita menor, pero dolorosa: «Me gustaría ganar el Campeonato Escolar de Eivissa, porque los dos años anteriores quedé segundo».
En kendo lleva menos tiempo compitiendo, pero ya ha conseguido un logro tan importante como ser segundo de España. El júnior indicó que este deporte «llegó hace tres o cuatro años a Eivissa y Formentera. Mi profesor de karate, Bartolo Tur, empezó y yo seguí sus pasos». Su objetivo es «llegar a ser como los hermanos Castro» en este arte marcial. Eso sí, antes tiene que centrarse en su otra especialidad, el karate, porque pronto viene el Campeonato de Balears, donde tratará de mejorar su subcampeonato de kumite y kata.
Jaume Escandell confesó que sus aficiones pasan única y exclusivamente por «el deporte». «Me encantan el karate y el kendo, y siento pasión por el motociclismo y el automovilismo», explicó este estudiante de 4º de ESO en Formentera. Descarta la posibilidad de dedicarse profesionalmente al karate o kendo, porque «no da dinero», pero, como alternativa, le gustaría «ejercer de profesor» en la materia.