Las instituciones han hecho un frente común para reclamar ante la ministra de Administraciones Públicas, Elena Salgado, una oficina delegada de extranjería en Eivissa. El Foro de la Inmigración, que congrega a instituciones, asociaciones de inmigrantes, Cáritas, Cruz Roja y partidos, acordó en su última reunión que los partidos políticos, PSOE, Eivissa pel Canvi y PP, presentarán el lunes en el pleno del Consell una moción conjunta para que se cree una oficina delegada de extranjería en Eivissa. La moción también se presentará en los ayuntamientos y en el Parlament.
El Consell, además, esta redactando una carta dirigida a la ministra Elena Salgado en la que le pide que reconsidere su decisión de no abrir la oficina en 2009. La negativa a la oficina es por cuestiones económicas ya que se ha de hacer una inversión, «pero entendemos que se puede reconsiderar la situación», dijo ayer la consellera de Política Social i Sanitaria y vicepresidenta del Foro de la Inmigración, Patricia Abascal. «Intentaremos que esta oficina se abra en 2009 y no en 2010», añadió.
La celebración hoy del Día Internacional del Inmigrante coincide con la presentación oficial de la Oficina de Información, Asesoramiento y Orientación a la Ciudadanía en temas de Inmigración (OFIM) que empezó a atender al público en junio. La OFIM, que se encuentra temporalmente en el edificio de servicios sociales de Cas Serres, ha atendido 440 demandas de información y asesoramiento. El mayor número de demandas es por el retorno voluntario, con 74; arraigo social y residencia. La mayoría de las peticiones para el retorno voluntario procede de Latinoamérica.
Para el jefe de sección de servicios sociales del Consell, Bartolo Riera, «este recurso «es un hito importante en el crecimiento de los servicios sociales porque hasta ahora no existía una oficina de titularidad pública que diera esta información específica». Según el padrón del 1 de enero de 2007, un 22,5% de la población es extranjera en las Pitiüses frente a un 18,20% en Mallorca y un 15% en Menorca.
La OFIM es un servicio público y gratuito, que atiende desde ciudadanos inmigrantes a colectivos relacionados con la inmigración informando y asistiendo jurídicamente en el procedimiento de tratamiento de residencia, expedientes de expulsión o reagrupación familiar. En el tema social, orienta sobre recursos, prestaciones y el retorno voluntario. La crisis económica ha afectado al colectivo de inmigrantes, que ha constatado la OFIM. «Hay una mayor demanda de recursos sociales, más peticiones de retornos voluntarios pero también se han endurecido las condiciones de entrada a España y se hace una aplicación más rigurosa de la ley a la hora de otorgar la residencia; no existe tanta flexibilidad», comentó la letrada de la OFIM, María del Carmen Marín. En cuanto al retorno, Marín señaló que pese a que, en un principio, recibieron muchas peticiones de información, «pero muchos se han echado para atrás y no es tanta la gente que ha retornado».
La consellera señaló ayer que «por la vía de la solidaridad hay más personas que regresan». Abascal aludió a que asociaciones como los paraguayos «tenían una especie de fondo común para poder ayudar a las personas a que vuelvan, sobre todo los que están en situaciones más precarias». No obstante, Abascal dijo que «la situación de las personas inmigrantes en Eivissa no es tan preocupante como en otras provincias; hay una especie de colchón que permite quedarse a la gente».
A través de la OFIM, siete personas han logrado finalmente volver a su país de origen, «que estaban en una situación irregular, sin trabajo; era bastante precaria», dijo Marín. Desde Cruz Roja también se tramita el programa de retorno voluntario. El proceso puede durar de dos a cinco meses. Los trámites oficiales suelen ser más lentos que los realizados por la vía de solidaridad.