Un total de cinco embarcaciones permanecen sumergidas en las inmediaciones de la bahía de Sant Antoni, según indicó ayer el técnico de Medio Ambiente del Consistorio ibicenco, Diego Ponce, quien ha asegurado que dicho problema deriva de «una falta de regulación».
Ponce confirmó que, sólo en el pasado año 2008, se hundieron dos barcos mientras que otros dos quedaron varados en la misma zona.
Esta problemática, ha dicho Ponce, se trasladó en diciembre a los técnicos municipales tras una reunión mantenida entre el Ayuntamiento y Ports de Balears que tenía como fin analizar conjuntamente la situación.
El técnico matizó que el hundimiento indefinido de estos barcos está convirtiendo el puerto de Sant Antoni en un «cementerio de barcos incontrolado» y ha asegurado que el problema se deriva de una «falta de regulación».
Según explicó el técnico, las casas aseguradoras de los barcos que se encuentran fondeados «ilegalmente» no se hacen responsables de los posibles accidentes; de manera que, cuando una embarcación se hunde o queda varada, «es abandonada a su suerte por los propietarios».
Limpieza intensiva
Ponce avanzó que Ports de Balears se ha comprometido a realizar una limpieza intensiva del fondo marino una vez hayan concluido las obras que están actualmente en marcha en el Club Náutico de la localidad.
Estos trabajos, ha aseverado el técnico, son «especialmente importantes» ya que la zona afectada linda directamente con la playa urbana de s'Arenal. Esta playa se ha visto muy afectada por los últimos temporales que han arrastrado gran cantidad de suciedad y restos de embarcaciones.