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as cuatro llegaron ayer a la cafetería con ganas de hablar en catalán. Dos de ellas, Roser Alenyar y Marlo Ripoll, son voluntarias de la campaña Ensenya la Llengua que promueve el Ayuntamiento de Eivissa. Luisa Cardeña y Herminia Castillo, por su parte, son las usuarias que quieren perder esa timidez que dicen tener a la hora de hablar catalán. «En mi caso me he apuntado porque a la hora de tener una conversación sé que tengo dificultades. Lo escribo y leo bien, pero me falta fluidez. Por eso decidí participar», cuenta Herminia. Su caso se repite en muchas ocasiones. Por este motivo el Ayuntamiento de Eivissa a través del departamento de Normalització Lingüística impulsa este proyecto de voluntariado en el que únicamente es necesario tener ganas de enseñar y aprender la lengua catalana: «Hay gente que procede de los cursos municipales de catalán, pero está abierto a cualquier persona que quiera practicar esta lengua. Hay muchas personas que saben escribirlo y lo entienden perfectamente, pero les falta fluidez a la hora de mantener una conversación. El objetivo es que los que se apunten tengan un espacio en el que puedan perder la timidez y lanzarse a hablar en catalán», explicó Carles Torres, técnico del departamento de Normalització Lingüística del consistorio de la ciudad. Las personas interesadas deben ponerse en contacto con el Ayuntamiento de Eivissa. Poco después se hacen unas preguntas a las personas para poder encontrar la otra mitad más acorde. El principal atractivo de estas sesiones es que no se trata de una clase de repaso normal: «Básicamente se trata de un espacio común en el que la gente se pone en contacto para hablar en catalán», afirmó el técnico de Normalització Lingüística. Las parejas que participen deben cumplir 10 horas de conversación, que pueden distribuir según les convenga. Esta campaña empezó el lunes: «Esta semana hemos tenido cinco parejas y con el próximo inicio de los cursos de catalán esperamos que se apunte más gente».
María José Real