G. R.
En la reunión mantenida ayer por el equipo de gobierno del Consell de Formentera con los vecinos del núcleo urbano de ses Bardetes, a las afueras de Sant Francesc, las peticiones del vecindario pasaron por una mejora sustancial de la zona, especialmente en aquellos aspectos defricitarios, productos en su mayoría de un urbanismo descontrolado.
Así, el Consell debe afrontar una cuestión compleja, dotar de aceras, mobiliario urbano, iluminación pública y arbolado en un barrio que con un crecimiento caótico, ha generado que apenas haya espacio ni siquiera para las aceras, con lo que lo convierte en un lugar peligroso para los viandantes. Además los vecinos solicitaron al Consell la colocación de un baden en la calle de ses Vinyes, la que comunica Sant Ferran con ses Bardetes, con el objetivo de disminuir el exceso de velocidad de los vehículos que circulan por esta recta. Tras comprometerse a poner medidas urgentes en este sentido, el equipo de gobierno informó de las actuaciones previstas en esta legislatura entre las que están la intervención en las calles sin salida para conseguir una circulación más fluida, pero al mismo tiempo existe un problema adicional ya que muchos de los viales ni siquiera están asfaltados y algunos de ellos tienen una fuerte pendiente por lo que las lluvias complican más circulación de vehículos y ciudadanos a pie.