Como cada mañana, Sara Longarella y Julio López salen a pasear con su nieta Sofía. La pareja llegó a la isla el uno de marzo para visitar a su hija, que reside en Eivissa desde hace algunos años: «Somos asturianos. Hemos venido muchas veces a la isla en meses diferentes para estar con nuestra hija y nuestros nietos». Durante la mañana de ayer eligieron a la plaza del Parc para disfrutar del sol del primer día de primavera: «Nos gusta mucho venir a esta plaza para tomar un poquito el sol».
La nueva estación llegó a la isla con una temperatura cercana a los 20 grados, por lo que fueron muchas las personas que decidieron disfrutar de ese ambiente risueño del primer día de primavera paseando por la playa o por la ciudad, tomando un té en una terraza o directamente en manga corta tomando el sol. «Sí que se nota que hay más gente por la calle, sobre todo en los últimos días. Las terrazas de aquí [la plaza del Parc] están llenas de gente a partir de las 11'00 horas y luego ya por la noche hasta prácticamente medianoche», explica Inma García, camarera del bar Pura Vida, para quien además la primavera significa el fin del aburrimiento: «Empieza a haber más movimiento y nosotros, los profesionales de la hostelería, nos aburrimos menos», comenta entre risas.
Buena parte del aumento de gente que visita Eivissa en estos días se debe al puente de Sant Josep que se celebra en nueve Comunidades Autónomás: «El lunes recibimos 20 visitas durante todo el día, mientras que ayer [por el viernes] 140 personas se acercaron a esta oficina para solicitar información, sobre todo de Madrid y Valencia porque en estas dos comunidades el 19 de marzo es fiesta y, por tanto, hay puente», afirma Lorena Sánchez, coordinadora de las oficinas de turismo del Consell d'Eivissa. Y añade: «Creo que después del puente habrá un bajón de gente y que repuntará antes de Semana Santa».
María José Real