El Consell ha detectado que la demolición de la casa Cretu no se ha hecho correctamente en cuanto a reciclaje de los residuos. Un celador de la institución y un agente de la Conselleria balear de Medi Ambient estuvieron ayer en la zona, donde comprobaron que se han tapado con tierra restos de ladrillos, porexpan, tuberías y elementos de los cimientos de la mansión. Sobre estos restos ya se estaba procediendo a la plantación de pinos y sabinas.
El conseller responsable del área medioambiental, Albert Prats, recordó ayer que todos estos materiales se tendrían que haber reciclado, ya que los desechos de construcción tienen que llevarse a canteras autorizadas y si hay plásticos u otros materiales se tienen que reciclar debidamente. En ningún caso se pueden triturar materiales como hormigón para rellenar la montaña, como sí es legal por ejemplo a la hora de construir una carretera para relleno de taludes. «Esta sentencia es precisamente por haber construido ilegalmente y no se puede dejar ningún resto. Se tienen que retirar todos los residuos», aclaró Prats, que indicó que ya han informado a la Conselleria balear de Medi Ambient, que tiene también competencias en el asunto.
El celador del Consell ahora tiene que hacer un informe con las fotos que han hecho. También el agente de Medi Ambient ha levantado acta. No se pueden cuantificar los restos enterrado hasta que no se hagan catas, aunque también se ha detectado que el relleno no sigue la orografía de la montaña.
En caso de que se confirmara que se han enterrado restos ilegalmente, Prats explicó que se tendría que volver a retirar todo y hacer cumplir el proyecto de demolición, que contemplaba una partida económica para la eliminación de residuos. Además, se tendría que hacer a cargo de la empresa Erri Berri, que es la encargada de este derribo.
El conseller explicó que ayer habló con el teniente de alcalde de Sant Antoni, Joan Pantaleoni, al que advirtió de esta situación. «Me ha dicho que le envíe el informe con las fotografías, cosa que haré inmediatamente, porque tenemos fundadas sospechas de que se ha enterrado material y se tiene que actuar correctamente», explicó Prats, que confía en la vía de la colaboración institucional para arreglar este problema. «Espero que el Ayuntamiento haga lo que tiene que hacer para ver si ha habido incumplimiento de contrato», añadió.
El primer teniente de alcalde de Sant Antoni, Joan Pantaleoni, confirmó que habló ayer con el conseller. «Me ha dicho que había sospechas fundadas de que se habían enterrado materiales que se tenían que reciclar», explicó el concejal, que hace dos días ya pidió al aparejador municipal que requiriera los partes del material transportado a vertedero, porque el asunto ya había sido denunciado por el grupo municipal PSOE-ExC. Según los datos que tiene Pantaleoni, ya se han enviado más de 80 toneladas al vertedero, incluyendo materiales como hierro, plástico y madera. «No tengo más datos y no sé si se ha enterrado algo, pero si se ha hecho algo mal lo comprobaremos y requeriremos a la empresa para que cumpla estrictamente el contrato», explicó el teniente de alcalde, que anunció que la semana que viene realizarán una cata para determinar el alcance del problema. Pantaleoni recordó que en el contrato se incluía la obligación de reciclar los materiales.
Hace escasos días, el grupo municipal de PSOE-ExC ya denunció una gestión irregular de los residuos, pero el equipo de gobierno lo negó.