El Consell ha conseguido rebajar a 22 días el período medio de pago a sus proveedores. Esto se ha logrado durante los meses de verano debido a los últimos créditos que ha solicitado el equipo de gobierno y a que el Govern balear ha abonado los pagos pendientes. En total, en julio se han pagado 7,8 millones de euros y en agosto se acabarán pagando otros trece más. De esta forma se ha acabado momentáneamente con la delicada situación que vivió el Consell durante algunos meses, en los que tanto la Pimeef como diferentes asociaciones se quejaron de los retrasos en los pagos, no sólo de esta institución, sino también de los ayuntamientos.
El conseller de Programació Econòmica del Consell d'Eivissa, Tomás Méndez, se congratuló por estas cifras y destacó que están por debajo incluso de lo que recomendó la Unión Europea, que proponía que las instituciones rebajaran el período de pago a proveedores a 30 días.
Incluso se han pagado las facturas más antiguas, para lo que se pidió un crédito especial en el pleno del mes de julio. «Está todo bastante al día ya y las previsiones de pago para septiembre y octubre son también buenas», explicó Méndez, que indicó que incluso hay gente que le ha felicitado por la prontitud de cobro.
Final de año «conflictivo»
De todas formas, el conseller no se confía porque los meses de noviembre y diciembre pueden ser otra vez «conflictivos». «Esto es un mundo muy vivo en el que haces previsiones en base a lo presupuestado, a lo que pensamos que se tramitará en los diferentes departamentos; también estamos presionando al Govern para que no haya retrasos en los pagos», explicó Méndez, que reconoció que ahora mismo están satisfechos con el Ejecutivo autonómico porque «ha cumplido con sus compromisos». Atrás quedan las críticas que vertía el Consell hace unos meses, cuando se quejaba de que el Govern tardaba mucho en pagar. «Ellos han recibido una inyección de dinero y han cumplido y lo mismo que en otros momentos nos hemos quejado de los retrasos ahora tenemos que decir que han cumplido con los compromisos que acordamos», explicó el conseller.
En cuanto al año 2010, Méndez indicó que no se presenta «nada bien», porque además los ingresos del Govern balear están cayendo «en más de un 30 por ciento». «Es una caída muy grande de ingresos y habrá gastos y ayudas inevitables», explicó el conseller, que indicó que a partir de septiembre empezarán a preparar el presupuesto para el año que viene.